Nota del editor: Hild, un Daeva del tiempo y el espacio, desapareció en el Abismo antes de poder concluir definitivamente su revolucionaria investigación de esta región. Este tomo contiene sus últimas notas en el diario, con el mes, la semana y el día de la expedición.

Gracias a los esfuerzos y sacrificios de algunos valientes Arcontes, hemos llegado a saber más sobre el Abismo de lo que se sabía en tiempos de Hild. Pese a ello, los apuntes de Hild hoy siguen teniendo relevancia y los valoramos mucho.

Son un testimonio del valor de aquellos que se adentraron por el bien de Asmodia en este terreno desconocido. Mientras sostenéis esta página en vuestras manos en un entorno cómodo y seguro, pensad en Hild, en sus camaradas y en las torturas a los que fueron sometidos.

1-2-4: ¿Desde cuándo hace estragos esta guerra? Ya no lo recuerdo... han sucedido demasiadas cosas. Estamos rodeados de elios que gritan "Venganza, venganza para Deltras", mientras seguimos recuperándonos del descubrimiento de Elísea.

Solo un puñado de los nuestros sobrevivió a la primera expedición... y ahora, de repente, nos encontramos en medio de una guerra. No sé cómo van a continuar nuestros trabajos de investigación. Este lugar es imprevisible.

Todo este imperio supera cualquier imaginación. Si no podemos abrir nuevos caminos armados de conocimientos, nos armaremos de valor. Somos asmodianos. No nos sometemos a nadie y las amenazas nos hacen reír.

1-3-5: Hoy la Corriente de Éter es más inestable de lo habitual. Todos sabemos por experiencia que explorar bajo estas condiciones es demasiado peligroso. Por esta razón hemos decidido darnos un día de prórroga.

Esta pausa inesperada nos ha subido la moral. Muchos Arcontes escriben cartas a sus familias y yo de repente recuerdo del día en el que descubrimos la abertura... la puerta a la otra dimensión que más adelante íbamos a llamar Abismo.

Las multitudes se aglomeraban para oírnos hablar y discutían exaltadas sobre las nuevas posibilidades. Sin embargo, algunos Daevas ancianos (los que recordaban la Catástrofe) estaban intranquilos. Ahora me pregunto si percibieron una amenaza que pasó desapercibida para el resto.

2-1-2: No puedo sacarme estos pensamientos de la cabeza. Los primeros Daevas que atravesaron la puerta eran encerrados aquí a menudo y estiraban la pata trágicamente. ¿Será ese mi destino?

Aún vivo, pero aquí no hay ningún obelisco, ninguna posibilidad de escapar a la muerte. En Pandemónium se trabaja con el "quisc", y, naturalmente, los demás también quieren oír más sobre ello. Aquí nadie quiere que lo consideren un cobarde y por eso apenas hablamos de ello.

- Nota del editor: Los primeros experimentos realizados en tiempos de Hild fueron un estrepitoso fracaso. El quisc no se perfeccionó hasta mucho tiempo después de que estallara la guerra entre elios y asmodianos.

2-3-2: Hoy descubrimos un lugar maravilloso. Es una isla en un espacio vacío, con árboles, extensos campos y agua dulce en abundancia. ¡Un fragmento de la antigua Atreia y, en el centro de todo, un objeto con fuerte energía etérea!

Si uno se acerca a él, emite un sonido grave que recuerda un gong profundamente enterrado en la Tierra. ¿Por qué no habíamos visto nunca algo parecido? Este descubrimiento me ha estimulado de forma indescriptible. Desde que comenzara la guerra apenas hemos hecho progresos. He rogado a la legión que reclame el objeto en nombre del pueblo asmodiano.

- Nota del editor: La descripción del lugar se ajusta bien al terreno que rodea el lago de Asteria. Entretanto sabemos que el misterioso objeto es un artefacto.

3-1-1: Nuestra expedición se ha cancelado antes de tiempo. Hace unos minutos llegó hasta nosotros un mensajero con un informe de unos Arcontes que regresaban a la fortaleza tras haberse encontrado una extraña criatura que por lo visto se parecía bastante a un Balaúr.

No es la primera vez que una expedición nos ordena volver, pero esto resulta extremadamente extraño. ¿Podrían estar emparentadas estas criaturas realmente con los Balaúres? Los otros intentan comprender y, aunque nadie quiere decirlo, reina el abatimiento general.

- Nota del editor: Posteriormente, se comprobará que estas criaturas desconocidas son Draconautas, una subespecie de los Balaúres.

7-3-6: Han transcurrido meses desde que se interrumpieron nuestras investigaciones y por fin hay esperanzas de que nuestra expedición pueda continuar. Nuestros Arcontes están devolviendo masivamente el golpe a los elios y hoy averiguamos oficialmente que podemos retomar nuestros estudios.

Nos esperan privaciones y necesidad, pero estamos de buen humor, pues es nuestro destino. He rogado a los cocineros que esta noche nos preparen una cena muy especial, pues podría ser la última que compartamos en mucho tiempo.

Marchután, el soberano del destino, ha dispuesto que seamos hombres y mujeres de palabra, no de hechos. Puesto que de nuevo nos espera un destino incierto, deposito toda mi confianza en su decisión y acepto con alegría las pruebas que ha escogido para nosotros.