Ahora puedo verlo... lo veo claramente. Las almas de los Daevas están atrapadas en el Templo de Besmúndir... en una especie de río subterráneo.

El espíritu de un Daeva llamado Calique me lo ha mostrado: un malvado chamán mantiene sus almas atrapadas.

Utiliza sus tormentos y pesares como una especie de fuente de energía.

¡Qué horror!

Los Daevas luchaban contra los Balaúres, pero ahora ese insidioso chamán ha conseguido atraparlos, quién sabe cómo.

Tenemos que liberar sus almas, [%username]. Solo soy una sacerdotisa: mi arma es mi fe. Pese a que es fuerte, no es suficiente para ayudarlos.

Solo un[f:"una"] [%userclass] con habilidades excepcionales puede liberarlos. Por el amor de Siel, ¿podríais echarnos un cable?

Aceptar Rechazar

¡Oh, lealtad y armas, [%username]! Esperaba que nos ayudaseis. Id primero al [%dic:STR_DIC_W_IDCatacombs_SZ_B3], bajo el Templo de Besmúndir, y hablad allí con [%dic:STR_DIC_N_Calike].

Ella os dirá cómo podemos liberar las almas de los Daevas. No será fácil, pero rezaré por vos. Rogaré por que os protejan todos los soberanos serafines.

¡El chamán puede darse por muerto!

Os habéis vuelto insensible, [%username]. Las almas de nuestros hermanos y hermanas se hacen pedazos y vos simplemente les dais la espalda.

Si no lo hacéis por mí, al menos hacedlo por ellos.

Yo no he pedido tener estos sueños, Daeva, pero si alguien necesita mi ayuda, hago todo lo que esté en mi poder.

Pero es que vos sois sacerdotisa.

¡Siel nos ha enviado a alguien que nos librará de este tormento! Nunca perdimos la esperanza de que nuestros ruegos fuesen escuchados. ¡Nunca!

Por favor, Daeva, acabad con Macunbello y poned fin a nuestro pesar. Hace ya mucho que estamos aquí. Hace mucho que sufrimos.

¿Cómo puedo matarlo?

Macunbello obtiene su energía de nuestro dolor: nuestro sufrimiento es su fuerza. Debéis ir en balsa hasta la isla y enviar las almas de los Daevas a la Corriente de Éter.

Cuantas más almas liberéis, más débil será Macunbello. Después, tendréis que vencer rápido a [%dic:STR_DIC_E_IDCatacombsN_Lichkey4_55_Ae] para enfrentaros luego a [%dic:STR_DIC_E_IDCatacombsN_LichNmd_55_Ah].

Sé que suena terrible, pero debéis destruir las almas de los Daevas para liberarlas. No hay otra manera. Hablad con el barquero, él os llevará hasta la isla.

Entiendo.

Hace ya muchísimo tiempo que no puedo dormir bien, [%username]. Los gritos me infunden miedo... Nada más tumbarme, empiezo a oír su sufrimiento.

¿Habéis podido liberar las almas de los Daevas y acabar con Macunbello? ¿Vuelven a ser uno con el éter?

Han sido liberadas, sacerdotisa.

Sé que sus almas os están agradecidas, [%username]. Por fin pueden descansar: han cesado sus tormentos.

Yo también os doy las gracias por haber quitado un gran pesar a mi corazón.

Hablar con [%dic:STR_DIC_N_Calike]

Liberar las almas de los Daevas y acabar con [%dic:STR_DIC_E_IDCatacombsN_Lichkey4_55_Ae] en el tiempo previsto ([%5]/1)

Destruir a [%dic:STR_DIC_E_IDCatacombsN_LichNmd_55_Ah] ([%8]/1)

Dar parte a [%dic:STR_DIC_N_Kailaus]

Liberad las almas atrapadas de los Daevas en el Pantano de Acherón y acabad con su atormentador, Macunbello.

Cailao dijo que había almas de Daevas atormentadas en el Pantano de Acherón, bajo el Templo de Besmúndir.

Cuando regresasteis con Cailao después de haber liberado las almas y de haber destruido a Macunbello, alabó vuestra actuación.

Nueva misión: [%questname] Activa: [%questname]