Habéis reunido muchas Monedas de hierro, ¿no?

Pues yo tengo objetos útiles para quienes utilizan magia: hechiceros, invocadores, clérigos y cantores. Si buscáis objetos para clases menos... espirituales, tenéis que hablar con Anontrite.

Entonces, ¿cuántas monedas tenéis exactamente?

Podéis cambiar 2 o 4. Por supuesto, los mejores objetos cuestan 4 monedas, así que decidid sabiamente...

Tomad 2 monedas. Tengo 4 monedas.

2 monedas...

Probad esto. Los objetos se reparten aleatoriamente y yo no puedo intercambiarlos sin más. Pero si el objeto recibido no os satisface en absoluto, seguro que algún comerciante os lo compra.

Podéis volver a probar suerte en cualquier momento o esperar hasta que hayáis reunido 4 Monedas de hierro. Con eso, podréis conseguir uno de nuestros mejores objetos.

¡4 monedas!

Tomad vuestro objeto, [%userclass]. Como quizá sepáis, tenemos demasiados objetos en el almacén como para catalogarlos, así que los vamos repartiendo sobre la marcha. Si el objeto os gusta, excelente.

Si no os gusta, podéis venderlo y ya está. Tengo entendido que algunos de nuestros artículos alcanzan muy buenos precios hoy día.

Lo siento si antes no me he explicado con la suficiente claridad. Mis recompensas son para hechiceros, invocadores, clérigos y cantores. Para nadie más.

A mí me parecéis uno de esos [plur][%userclass], así que hablad con Anontrite.

Lo siento pero los objetos no se pueden intercambiar.

Todo el mundo tiene la misma oportunidad única. Si cambiásemos las reglas de repente, se produciría un revuelo. Lo que sí podéis hacer es vender a un comerciante lo que recibáis.

¡En caso de que no recibáis lo que queríais, conseguid más monedas y volved a intentarlo! Nunca se sabe, quizá entonces tengáis más suerte.

Dijisteis que teníais más monedas, [%userclass].

Obviamente habéis contado mal y no puedo hacer nada por vos antes de que hayáis reunido la cantidad necesaria de Monedas de hierro.

Volved cuando las tengáis. Hasta entonces, largaos y no me hagáis perder el tiempo.