¡Asfelumbra, [%userclass]!
Soy Areque, maestro comerciante de todas las mercancías que son necesarias para la extracción de éter.
¿Qué puedo hacer por vos?
Ojalá hoy no tuviera que trabajar. De verdad que debería organizarme para tomar unas vacaciones. El negocio me exige tanto últimamente, que casi no tengo tiempo para mi mujer.
Ante trabaja para Lanse en el Pabellón de los Artesanos. Desde que ascendí me es más difícil hablar con ella.
Servir a los Daevas me roba tanta energía que, para cuando llego a casa, estoy completamente agotado. Tengo la sensación de estar dejándola algo abandonada.
No lo tengo muy claro. Le gustan mis alas, pero percibo en su rostro el reflejo de la envidia y la tristeza.
Y sin embargo nuestros camaradas Daevas necesitan que esté presente más que nunca.
Lo seguiré haciendo bien como sea. Encontraré el modo.