¡[%username]! ¡Acabo de recibir el regalo de Sadena! Os debo dos favores. No os habría pedido que encargaseis el regalo si hubiese sabido que también os tendría que enviar a por material. Aunque tal vez sí...
Con todos los Quinas que tenía pensado gastar en su regalo... y ahora solo puedo decirle lo que siento por ella. ¡Qué más da el dinero!
Oh, es terrible. Y si me discurso en el atas... ejem, si me atasco en el discurso... ¿Veis? ¡Ya lo he hecho!
Sí. No. No me entendéis. No se trata solo de darle un regalo. Voy a confesarle lo que siento.
¡Y sé que para Sadena... todo debe ser perfecto! El lugar, el momento, el ambiente y hasta el traje tienen que ser los adecuados.
Sé que tengo el regalo perfecto, pero tengo que acertar también con todo lo demás.
¡Ese es el problema, [%username]! No sé qué ponerme. Da igual que abra de par en par mi corazón si parezco un sin techo.
Tenéis que hacerme un último favor. Después de eso no os volveré a molestar nunca más, os lo prometo. Se trata de algo muy sencillo: comprad un frac y comprobad cómo reacciona Sadena.
Si no os hace pedazos al frac y a vos, me lo pondré cuando vaya a verla. ¿Me ayudáis otra vez?
¡Ah! ¡Muchísimas gracias! Si Sadena y yo llegamos a ser pareja, nunca olvidaré lo que habéis hecho. No creáis que el Distrito de Vanajal me va a cambiar.
Es bastante exquisito con respecto a la ropa. En realidad parece que solo le gustan las creaciones de Eiren. He visto que [%dic:STR_DIC_N_Lark] tiene algunos en la Calle de la Prosperidad. Compradle un frac a Larc y a ver cómo reacciona Sadena.
¡Para mí es tan importante! Si hay algún detalle que indique que no le gusta, y por lo general suele ser bastante clara, tendremos que encontrar otra cosa.
Conozco a Sadena. Para ella es muy importante la ropa. A la mayoría de las mujeres les basta con que les ofrezcan sentimientos sinceros, pero a ella no.
Sin la ropa adecuada no podré hablar con ella en la vida.
¿A dónde vais con esa pinta?
No me he perdido nada importante, ¿no? Debo dejarme ver en todo evento público en Pandemónium.
No. No, me habría enterado. ¿Pero por qué os habéis acicalado entonces? Los [plur][%userclass] suelen llevar ropa de combate.
Me parece extraordinaria. Es de Eiren, ¿verdad?
Sí. Sin duda es de Eiren. No me equivoco en estas cosas. La armonía entre el corte y el patrón es perfecta.
Os... queda muy bien.
Pues ya que preguntáis... ¡Os queda horroroso! No se trata de comprar la prenda más cara y vestirla. ¡Tenéis que vestir prendas que os queden bien! El tejido, el corte, todo debe combinar. Y si encima cuesta una barbaridad, mejor que mejor.
Mirad lo que lleváis puesto. El color no es nada acertado. ¿Y el corte? No, no, no... Os hace muy rollizo[f:"rolliza"]. No os favorece mucho. La clase no es algo que se pueda comprar. O se tiene gusto o no se tiene. Y vos...
Mientras vos os ocupabais del traje, he hablado con Selesti para montar el escenario perfecto... y Agamo ha aceptado recitar su mejor poesía. El ambiente tiene que ser simplemente perfecto. No puede ocurrir ni el menor percance. El ambiente es cuanto menos tan importante como el regalo o el traje.
Contadme, ¿le ha gustado el frac?
¡Es la primera vez que me gasto tantos Quinas en un traje, pero por ella vendería hasta mi espada! Pues me enfundaré en este frac y la esperaré en el Distrito de Vanajal, en la catarata que hay delante de la Sala de Banquetes. Al menos está vez no pareceré tan fuera de lugar.
Sadena tiene que ver el esfuerzo que he hecho y entonces entenderá también lo que siento por ella. A lo mejor ella siente lo mismo por mí.
¡Decidle a Selesti y a Agamo que mi gran momento está a punto de llegar! ¡Que quiero declararle mi amor a Sadena! Ah sí, y no olvidéis invitar a la persona más importante... Sadena. ¡No le voy a confesar mi amor a Adamo!
En Pandemónium soy conocido por mis banquetes. ¡He organizado eventos para lo mejor de cada casa! Pero contentar a algunos es sencillamente imposible. Los Daevas del Distrito de Vanajal son especialmente difíciles, sobre todo Sadena... ¡Es demasiado exigente! ¡No puedo trabajar con ella!
Quería guirnaldas de flores blancas y se las llevé. Preciosas guirnaldas con unas flores blancas perfectas. Pero Sadena cambió de opinión, por supuesto. De repente las flores blancas no pegaban con la mesa y decidió utilizar flores rojas en su lugar. ¡Y cuando le llevé las flores rojas, ¡cambió de idea y pidió fuentes luminosas! ¡Arg!
¡Ja! ¿En serio es tan insensato como para declararle su amor a Sadena? En mi opinión, debería mantenerlo en secreto y esperar a que se le pasara con el tiempo. Pero sobre gustos no hay nada escrito.
La decoración está lista. Y esta vez todo es perfecto. Ni siquiera Sadena tendrá queja.
Un espadachín debe entrenar a diario o estar preparado para que lo sorprendan en el campo de combate.
Y lo mismo ocurre con los poetas y los bardos. Tengo que exponer mis poesías en público, así pulo mi arte como un guerrero afila su espada con la piedra de afilar. Así que si oís sonidos extraños, no creáis que me estoy asfixiando... Son mis ejercicios vocales.
¿Estáis aquí por un recital?
Es la mejor poesía de amor de todos los tiempos. ¡Una epopeya epatante!
Nadie lo ha oído aún. Hasta yo me lo tengo que aprender todavía. El amor de Dáscair será la primera dedicatoria de esta poesía.
Salgo de inmediato a la Sala de Banquetes. ¡No se puede hacer esperar al amor! Ni una sola mujer en todo Pandemónium se podrá resistir a su declaración de amor cuando haya escuchado mi último éxito poético.
¿Vos otra vez?
Sois obstinado[f:"obstinada"]...
¡No sé de dónde sacáis la desfachatez!
¿Quiere que me encuentre con él? ¿Ahora mismo? ¿Un vulgar Daeva quiere mangonearme? No lo puedo entender.
Al menos tendría que haberme preguntado.
De todos modos me pilla de camino. Pero si me acerco, desde luego que no es por Dáscair.
¡Aquí estáis! ¿Habéis hablado con Selesti y Agamo?
¡Y Sadena, decidme que la habéis visto!
¿Qué ha respondido? ¿Acudirá a mi encuentro?
¡Aaaah! He invertido tanto tiempo y tanto esfuerzo y, al final, nunca sabrá lo que siento por ella.
Creía que estaba preparado para lo peor... pero... es muy doloroso.
Sí. Tenéis razón, [%username]. Pasa mucho tiempo allí.
¡No me rendiré tan fácilmente! Conozco a Sadena y estamos hechos el uno para el otro, ¡lo sé!
Tengo el regalo adecuado, el traje adecuado, el ambiente adecuado y el traje adecuado. Solo tengo que esperar el momento adecuado.
Poneros el [%dic:STR_DIC_E_sadenaloves] e id a verla para comprobar su reacción
Llevar el frac a [%dic:STR_DIC_N_Daskair]
Ir a visitar a [%dic:STR_DIC_N_Selesti]
Ir a visitar a [%dic:STR_DIC_N_Agamo]
Ir a visitar a [%dic:STR_DIC_N_Sadena]
Hablar con [%dic:STR_DIC_N_Daskair]
Animar a [%dic:STR_DIC_N_Daskair]
Dáscair ha dicho que quiere dejar todo bien atado para su declaración de amor a Sadena. Ayudadle a elegir el traje y a preparar una declaración de amor que esté a la altura de las altas exigencias de Sadena.
Para no desentonar en el momento de su declaración, Dáscair quería elegir ropa adecuada y preparar un banquete.
Le dijisteis qué ropa le gustaba a Sadena, encargasteis a Selesti y a Agamo los preparativos necesarios y llevasteis a Sadena la invitación a la Sala de Banquetes.
Pese a sus esfuerzos, Sadena no aceptó la petición de Dáscair.