¿Y bien? ¿De qué se trata?

¡Duendes deplorables y miserables! ¡Han perdido el Templo de Udas!

Ya es lamentable que el enemigo haya conquistado el templo, pero aceptar esta derrota es sencillamente una vergüenza.

Me avergüenza, asmodiano[f:"asmodiana"]. Vos también deberíais avergonzaros.

Nuestro sacrificio para ganar esta guerra es enorme, pero la determinación de nuestros enemigos parece brillar por su ausencia.

Todos estamos en el mismo barco.