Que Lady Siel os bendiga.
Dejad que vuestros ojos se impregnen con la visión de este cielo. Sigue siendo tan impresionante como en los tiempos anteriores a la Gran Catástrofe.
Hubo un tiempo en el que sobrevolaba este cielo con vertiginosas alas, lo cruzaba como si fuera un rayo. Pero hace ya tiempo de eso. Este peculiar viento me trae el recuerdo de aquellos días.
Algún día mi pueblo volverá a ocupar el paraíso. Algún día.