[%username], gracias de todo corazón por vuestra labor en la protección de Elísea como miembro de la Orden del alabastro de la mano divina de Aion.

Yo me encargo de entregar recompensas a los clérigos y cantores de nuestra orden.

Tengo que saber cuántas medallas me traéis para poder valorar vuestra solicitud de recompensa.

Tengo 3 Medallas de alabastro. Tengo 7 Medallas de alabastro. Tengo 15 Medallas de alabastro.

¿Decís que tenéis 3 Medallas de alabastro?

Aion sabe qué pruebas habréis pasado para ganároslas.

Tengo que recordaros que la Orden del alabastro ofrece recompensas a cambio de 3, 7 y 15 Medallas de alabastro. ¿Queréis la recompensa por 3 medallas?

No quiero esperar. Esperemos un poco.

Habéis elegido la recompensa por 7 Medallas de alabastro.

Reunir tantas medallas es una hazaña asombrosa. Antes de daros la recompensa, tengo que preguntaros si os gustaría esperar hasta reunir 15 medallas y obtener una recompensa mejor.

Ya he esperado lo suficiente. Esperaré hasta reunir 15.

Habéis superado nuestras expectativas al reunir 15 Medallas de alabastro.

La Orden del alabastro ofrece una recompensa sensacional para los que reúnen tantas medallas.

Aunque la orden persigue objetivos sublimes, sabe que hay que recompensar a los Daevas extraordinarios aquí en la tierra.

¡Qué ganas tengo de ver mi recompensa! Me guardo las medallas un poco más.

Exactamente 3 Medallas de alabastro. Gracias por los servicios prestados hasta ahora. Regresad cuando hayáis reunido más medallas.

La Orden del alabastro de la mano divina de Aion os agradece de nuevo vuestros servicios. Os veré de nuevo cuando hayáis reunido más medallas... Lo que sin duda haréis, ¿no?

Tomad este regalo, Daeva, y alegraos por los frutos de vuestro trabajo.

Por 15 Medallas de alabastro os entrego este regalo, destinado a el[f:"la"] Daeva que comprende el sentido de nuestra misión de proteger a Elísea.

¡Enorgulleced a Aion!

Hola, [%username]. Solo tengo recompensas para clérigos y cantores.

Para obtener vuestra recompensa tendréis que buscar a otro.

Os lo agradezco de nuevo en nombre de toda la Orden del alabastro.

Por favor, continuad poniendo vuestras venerables facultades al servicio de Elísea y de la Orden del alabastro.

Lo siento. No tenéis suficientes Medallas de alabastro para cambiarlas por una recompensa.

Si queréis obtener una recompensa justa, traed la cantidad correcta de medallas la próxima vez.