Con esfuerzo constante siempre es posible alcanzar los objetivos.

El éxito necesita tiempo; no deberíais contar con él directamente al principio de una misión.

Lo mismo se aplica a las recompensas. Precisamente en estas cosas es mejor hacer planes a largo plazo.

Recompensa por mérito

¡Que la paz de la oscuridad sea con vos!

(Termináis la conversación).