¿Qué estáis mirando? ¿Nunca habíais visto a un gran Daeva con una calabaza en la cabeza?

¡Por los soberanos serafines!

No hace mucho tiempo saqué a esa escoria sulaca de la calle, ¿sabéis?

Estaban desesperados y yo les mostré generosidad mientras todos los demás los ignoraban. ¿Y qué recibo a cambio? ¡Nada más que preocupaciones, enfados y problemas!

¡Esta es la última vez que ayudo a un Sulaco!

De los errores se aprende...