No es fácil conseguir monedas.

No obstante, si pensáis lo que podéis comprar con ellas, no debería resultaros tan difícil.

En cuanto tengáis monedas, me las podéis entregar a cambio de una armadura.

Canjear monedas

¡Que la paz de la oscuridad sea con vos!

(Termináis la conversación).