¿Quién soy? Soy un[f:"una"] Daeva de la vida.
Me he pasado toda la vida protegiendo todo ser viviente de Atreia y me he dedicado a ello. Ya fueran plantas, animales o seres sensibles, no importa. Cualquier vida es valiosa.
La vida es un reto, joven Daeva. Puesto que estáis aquí, me podríais ayudar con un par de retos, ¿no?
Hace un tiempo estuve en Taloc y me encontré con un calderero sulaco bastante descuidado. Intenté acercarme para ofrecerle consuelo y algunos Quinas, pero salió corriendo.
Esto me encogió el corazón. ¿Os importaría entrar y buscarlo?
El interior de Taloc no es precisamente un buen lugar para hacer negocios. Tiene que haber un buen motivo por el que se encuentre ahí.
Procurad que os cuente su vida.
Se llamaba... Se llamaba... ¡Ah! ¡Ahora me acuerdo! Se llama [%dic:STR_DIC_N_Shulack_Elim_1].
¿Estáis diciendo que no vale la pena esforzarse por un Sulaco?
Los elios nos hemos vuelto de lo más ruines. Miramos a los Sugos y a los Sulacos como si fueran unos niños que se hacen pasar por adultos.
Pero Aion me ha vuelto más sensible, al igual que a los elios. ¿Acaso no se merecen nuestro respeto? Pensad sobre ello, joven Daeva.
¿Quién? ¿Yo? Yo no soy nadie.
Debéis olvidar que me habéis visto. No soy más que un Sulaco. No le hago daño a nadie. Lo único que hago es intentar ganarme la vida aquí, en Taloc.
Leña para el fuego. Vendo leña para el fuego y cosas similares. ¿Queréis comprar algo antes de marchar?
Oh, Daeva, queréis oír mi historia. Es demasiado triste y humillante. Yo... fui poco inteligente. He abandonado a mi familia. ¿Por qué me escucháis? Sois diferente a los otros Daevas. Al parecer apreciáis a los Sulacos. ¿Ayudaríais a un Sulaco como yo?
No se trata de mí. Se trata de mi mujer y de mis hijos. No sé cómo les ha ido desde que me fui. ¡Los dejé en la estacada!
¿Seríais tan amable de ir en busca de mi hijo [%dic:STR_DIC_N_Shulack_LF4_1] y darle este saco? Está lleno de provisiones que he ido reuniendo y comprando. Ya sé que no es gran cosa, pero es todo lo que tengo. Y decidles, por favor, que lo siento mucho... Y que les echo de menos...
¿Quién? ¿Mi padre? ¿Él nos manda esto? ¿Sigue con vida?
Le he dicho a Sesquiqui que sigue vivo... y quería creer que sí, pero no estaba muy seguro.
¿Seguro que era papá? ¿De verdad que está bien?
¡Buaaaaa! ¡E... Echo de menos a mamá y a papá!
Expulsaron a papá. Y cuando evacuamos el pueblo, ¡un Balaúr mató a mamá con una flecha incendiaria!
¡No se lo contéis a Sesquiqui! Es demasiado joven para entenderlo. Tomad esto. Es para vos, por las buenas noticias que nos habéis traído.
Buscar a [%dic:STR_DIC_N_Shulack_Elim_1]
Llevar el saco de provisiones de [%dic:STR_DIC_N_Shulack_Elim_1] a [%dic:STR_DIC_N_Shulack_LF4_1]
Encontrad al Sulaco descuidado que deambula por Taloc y averiguad qué hace allí.
Tiala os pidió buscar al extraño Sulaco que merodea por Taloc. Cuando encontrasteis a Dorquin, este os dijo que se escondía en Taloc porque había sido desterrado de su poblado.
Os pidió que buscarais a su familia, que les entregaseis un saco lleno de provisiones y que les dijerais que los echaba de menos.
Llevasteis el saco a Seiquin, que se alegró mucho al saber que su padre sigue vivo.