[%username], últimamente he oído vuestro nombre muchas veces.

Todos comentan vuestras excelentes habilidades.

Dicen que cumpliríais cualquier misión a las mil maravillas.

Vuestra capacidad es famosa, tanto en la batalla como en el vuelo.

No dejo de aprender cosas nuevas.

[%username], tengo una información útil para vos.

¿Ya habéis oído hablar del Taller Tigraqui?

Es un taller de Sugos en el que se fabrican armas y armaduras draconianas.

Pero también crean otras cosas: unas alas especiales.

(Seguís escuchando).

Estas alas especiales podrían ayudaros, [%username], pero hay un problema. La [%dic:STR_DIC_E_AB1_name] es difícil de encontrar.

Los Sugos del Taller Tigraqui venden sus mercancías en Sánctum, pero casi nadie sabe dónde está su base.

Debe de estar en algún lugar de Resanta, pero en el mapa no aparece.

[%username], averiguad dónde está el taller.

Hay rumores de que un Sugo llamado [%dic:STR_DIC_N_Shugo_AB1_13] fabrica las alas especiales. Buscadlo.

(Termináis la conversación).

¿Cómo habéis llegado? No ha debido de ser fácil, yang.

Ah, ¿venís por rumores sobre alas especiales, tal vez?

Sugo ve que en Resanta se habla mucho sobre estas alas, yang, yang.

Es cierto que Sugo fabrica alas especiales, yang.

(Seguís escuchando).

Con alas de Sugo se puede volar muy deprisa.

Pero hay pequeño problema, yang, yang.

Es que... no son precisamente seguras, yang.

Algunos Daevas han resultado... heridos durante vuelo de prueba.

Pero gracias a ellos se han podido mejorar alas.

No miréis a Sugo así. Se trata de Daevas: no mueren fácilmente.

(Seguís escuchando).

Sin embargo, Daeva llamada Riazor nunca regresó de vuelo de prueba.

Quizá le haya pasado algo. ¿Daeva podría ir a buscarla, yang?

Confiad en Sugo y poneos estas alas.

Mostrarán camino a Daeva, yang, yang.

Me gustaría probarlas...

¡Oh, qué suerte!

¿Habéis venido a salvarme?

Empezaba a pensar que iba a tener que aguantar aquí mucho tiempo.

¿Qué ha ocurrido?

Esas alas que probé eran increíbles.

Muy rápidas, pero también muy inseguras.

Mientras volaba a la Entrada al Ojo de Resanta, de repente caí y tuve que aterrizar aquí de emergencia.

Me hice daño y encima esto está plagado de enemigos, así que he estado al borde de la muerte en más de una ocasión.

¡Un peligro!

¡¿Qué?!

Qué suerte que estéis sano[f:"sana"] y salvo[f:"salva"]. Es mejor que nos vayamos antes de que aparezcan más.

No obstante, estoy herida y solo seré una carga para vos, [%username].

Encontraré el camino de vuelta por mi cuenta cuando me recupere. Partid sin mí, [%username].

Comunicadle a Aguemoner que las alas son rápidas, pero corren el peligro de desmoronarse sin previo aviso.

(Termináis la conversación).

Daeva ha vuelto, yang, yang.

Pero ¿por qué ha venido solo Daeva?

¿Daeva no ha encontrado a Riazor?

No... le habrá pasado nada malo, ¿yang?

(Informáis).

¿Entonces Daeva dice que Riazor voló rápido con alas de Sugo y después cayó?

Eso no había pasado nunca, yang.

Pero rápidas sí que eran, porque ha llegado a Entrada a Ojo de Resanta en abrir y cerrar de ojos...

Muchas gracias por informe. Ahora Sugo sabe qué debe mejorar, yang.

Hablar con [%dic:STR_DIC_N_Tellus] en el [%dic:STR_DIC_W_AB1_1]

Encontrar la [%dic:STR_DIC_E_AB1_name] y hablar con [%dic:STR_DIC_N_Shugo_AB1_13]

Buscar a la desaparecida [%dic:STR_DIC_N_Ab1_Aiter]

Hablar con [%dic:STR_DIC_N_Ab1_Aiter]

Acabar con los [plur][%dic:STR_DIC_M_Ab1_LizardRaQ1075_36_An] y hablar con [%dic:STR_DIC_N_Ab1_Aiter]

Hablar con [%dic:STR_DIC_N_Shugo_AB1_13]

Orden: presentaos ante Telo en el Embarcadero de Téminon y os dará información importante.

Telo dijo que había oído hablar de vuestras extraordinarias habilidades y os reveló información útil.

Os recomendó ir al Taller Tigraqui porque allí fabricaban alas especiales. Debíais visitar a un Sugo llamado Aguemoner.

La Isla Tigraqui no aparecía en el mapa, así que os costó trabajo localizarla. Comprobasteis que efectivamente fabricaban alas, pero había un pequeño problema.

Os pidieron que buscarais a Riazor, que había desaparecido en un vuelo de prueba. Cuando la encontrasteis, os contó que las alas eran muy rápidas, pero no tenían suficiente estabilidad y podían caer en cualquier momento.

Cuando comunicasteis a Aguemoner lo que le había pasado a Riazor, os lo agradeció. Ahora sabía qué debía mejorar.

Orden: [%questname] Progreso: [%questname]