Os estaba buscando por todas partes, [%username]. Hay mucho que hacer y...
¿Qué os pasa? ¿Dónde tenéis la cabeza?
No se duerme en horas de servicio, [%username]. Esto es una tropa de mercenarios, no una guardería. Si vuelve a suceder, os expulsaré.
Presentaos ante [%dic:STR_DIC_LA148]. Acabamos de recibir nuestro primer encargo y queremos causar una buena primera impresión. Ahora podréis demostrar de qué madera estáis hecho[f:"hecha"].
Bien.
Si dais lo mejor de vos, pasaré por alto vuestra impuntualidad. En caso contrario tendréis que véroslas con [%dic:STR_DIC_LA148], y ese se enfurece pronto.
¿A qué estáis esperando?
¿Cómo?
¡¿Os negáis?!
Esto no es ningún campamento de vacaciones, [%username]. Controlaos, si no [%dic:STR_DIC_LA148] os echará un sermón.
Oh, ¡qué bien que por fin os hayáis dignado venir, [%username]!
Bien, para aclararlo de una vez: aquí no queremos gandules. Todos nos entregamos al máximo, todos ponemos de nuestra parte y todos podemos confiar en los demás. Puede que tengáis talento para ser [%userclass], pero eso no quiere decir que podáis aparecer cuando os venga bien.
La próxima vez que me oigáis chasquear los dedos espero que vengáis corriendo, [%username].
A partir de ahora trabajáis conmigo. O, mejor dicho, yo os daré vuestras instrucciones.
Al capitán Calio se le ha agotado la paciencia y me ha asignado a mí la solución de los problemas de la Llanura de Acarios.
Me encantaría trabajar con vos.
Ah, no es necesario saludar. Tan solo escuchadme con atención y trabajad.
Podréis ganar una fortuna con esto.
Reuniros con [%dic:STR_DIC_LA148]
Mires os busca urgentemente. Reuníos con él en la entrada del pueblo de Acarios.
Acababais de despertar de un sueño extraño y estabais desconcertado cuando Elpas os envió a Mires, quien os dijo que en el futuro os encomendaría misiones.