¡Daeva! ¡Ayudad a Lasif!
[%dic:STR_DIC_M_LDF5_Under_VriTR_Stun_Q_Fi_N_65_Ae] ha ofendido a Lasif.
Lasif no puede dejarlo así. ¡Esto clama venganza! ¡Debo restaurar mi honor!
Si matáis a [%dic:STR_DIC_M_LDF5_Under_VriTR_Stun_Q_Fi_N_65_Ae], Lasif os dará una recompensa.
¿Qué os parece, Daeva?
Me han dicho que un preso balaúr ha planteado una petición especial.
Por lo que he oído, [%username], parece ser que os han pedido que os involucréis en una venganza personal. Hay gente muy extraña...
[%dic:STR_DIC_M_LDF5_Under_VriTR_Stun_Q_Fi_N_65_Ae] también le está creando problemas a la tropa de purificación de Cantalón.
Es un enemigo difícil. Os pedimos que os ocupéis de él, [%username]. ¿Qué os parece la situación?
Así que Azac ha sido eliminado con éxito.
Hemos obtenido la información debido al rencor de un único Balaúr, pero para nosotros también era alguien a quien teníamos que aniquilar. No os preocupéis por eso.
Tal como están las cosas, cualquier ayuda nos viene bien, ya sea de un enemigo o de un comerciante.
Acabar con [%dic:STR_DIC_M_LDF5_Under_VriTR_Stun_Q_Fi_N_65_Ae] ([%2]/1)
Hablar con [%dic:STR_DIC_N_LDF5_Under_Oturu_E]
Utilizad la información de Lasif, prisionero de los desertores de Tiamat, y eliminad a Azac.
Lasif, el oficial del ejército de Beritra capturado por los os desertores de Tiamat, podía entender el material de Azac.
Acabasteis con él y e informasteis a Otur, que os dijo que el fin justificaba los medios.