¿Qué tal os va?

¿Pensáis que este lugar es seguro porque no hay asmodianos ni monstruos?

Aquí siempre hay algún tipo de accidente y conflictos pequeños o grandes entre los Daevas.

Sin embargo, los Daevas son los elegidos de los soberanos.

Por eso mi obligación consiste en tapar sus errores por voluntad de los soberanos y velar por la seguridad del lugar.

Por tanto, soy sirviente de los soberanos y al mismo tiempo vigilante de los Daevas.

¡Hasta pronto!