Sería una lástima malgastar de esa forma las Lágrimas de Cromede, [%username]. Si Cromede viera lo que las estáis usando de mero complemento, seguramente volvería a deshacerse en llanto.
¡Si las fundís y mejoráis con ellas la Lanza del juez, su poder aumentará de forma considerable! ¡Se volvería prácticamente indestructible!
Bien, necesitáis para ello tres cosas: las Lágrimas de Cromede, la Lanza del juez y un herrero con mucho talento.
Lo primero ya lo tenéis y, gracias a mi legendario talento, lo tercero, también. Ahora solo os falta la Lanza del juez. Si sois capaz de conseguirla, yo me encargaré del resto.
Deberíais dar gracias a Ariel por que esté dispuesto a ayudaros, [%username]. Soy uno de los mejores herreros de toda Elísea.
Es más, soy tan bueno que incluso puedo mejorar vuestra lanza y deciros dónde encontrarla.
La tiene [%dic:STR_DIC_M_FireSanctuaryQueenBoss_37_Ae] en el Templo del Fuego de Asmodia. Será un paseo por el campo.
¿Cómo podéis dudar de mí, [%username]?
¡Soy Ucon! ¡Soy el herrero más famoso de toda Elísea! ¡Estas manos son legendarias!
No recibiréis más ofertas como esta... así que pensáoslo bien.
¿Tenéis aquí la Lanza del juez, [%username]?
Dadme la lanza y las Lágrimas de Cromede. Crearé para vos una lanza que será la envidia de todos los elios.
Decidíos antes de que cambie de opinión.
¿Teméis que pueda dañar la Lanza del juez?
Eh, que soy el herrero más famoso de toda Elísea, ¿y vos creéis en serio que podría romperlo?
Confiad en mí, Daeva. No pondría en juego mi buen nombre fabricándoos un arma de poca calidad. Pero para poder demostrároslo, la lanza debe encontrarse en vuestro cubo, por supuesto.
¡Buf! ¡Ha sido duro! ¡Ya había olvidado el trabajo que dan estas grandes y pesadas lanzas! Tanto martilleo...
Pero lo he conseguido... Tomadla. La Lanza del juez está lista.
Obtener los materiales necesarios para mejorar la Lanza del juez y llevárselos a [%dic:STR_DIC_N_Ukon]
[%collectitem]Ucon ha dicho que puede mejorar para vos la Lanza del juez si le traéis los materiales necesarios.
Ucon dijo que las Lágrimas de Cromede eran óptimas para reforzar aún más la Lanza del juez. Dijo que os podría ayudar con ello si le llevabais las cosas necesarias.
Confiasteis en él y le disteis las Lágrimas de Cromede y la lanza. Cumplió con su palabra y confirió más poder al arma.