¡Sangre por sangre!
Como asmodianos hemos perfeccionado el acorralar al enemigo.
Los Balaúres son peligrosos, pero los elios... esos malnacidos que tenemos por hermanos y hermanas pueden ser incluso más mortíferos. Tenemos que acabar con Tiamat, pero no debemos olvidar que el soberano empiriano Cáisinel es igual de perverso.
Andaos con ojo. Los cobardes de los elios atacan en el momento en el que somos más vulnerables.