Aroma de coconas es irresistible, yang, yang.

¡Coconas ponen contento a Sugo!

¿A Daeva gustan Coconas?

A Sugo no hay nada que guste más que Coconas, yang.

Su olor dulce es simplemente irresistible.

Sugo no puede pensar en otra caso que no sean Coconas sabrosas, yang, yang.

(Termináis la conversación).