¡Saludos, Daeva!
A veces estoy harto de mi trabajo como instructor.
Mi corazón ansía entrar en combate,
pero tengo talento para la enseñanza y por eso me han dado este puesto.
Hasta ahora no hay ningún problema.
Los preparativos para la última batalla contra Tiamat van como la seda.
Pero a veces me invade la preocupación.
Quizá estemos subestimando la fuerza del soberano balaúr.
A tenor de la fuente de la fuerza se puede uno imaginar lo fuerte que debe de ser Tiamat.
Prueba de ello es que ha conseguido que sus fuerzas tomen forma para cambiar el paisaje completamente.
Por otro lado, esto hace suponer que la fuente de la fuerza es también el punto débil del soberano.
Si aprovechamos este hecho podemos conquistar Tiamaranta y derrocar a Tiamat.
Regresad siempre que queráis escuchar la explicación sobre Tiamaranta.