Sé muy pocas cosas de mi familia. Hasta donde alcanza mi memoria, mi madre y yo somos los únicos que quedamos de una estirpe que en su día fue poderosa.

Antes de que la Alianza dragoniana se la llevara, mi madre me habló de un pariente del que yo no sabía nada, un tío.

He pedido a muchos Daevas que pasaban por aquí que me averiguasen su nombre, para poder descubrir más cosas sobre él. Pero lo que he oído...

¿No os ha gustado?

Hay algo aún peor. En la biblioteca de Pandemónium hay un libro antiguo que lo nombra. Se llamaba Taros.

Fue uno de los grandes guerreros de la Guerra Milenaria, pero lo alcanzó la crueldad del destino: aceptó una maldición de tortura eterna para salvarle la vida a un soldado.

Pensar que sigue sufriendo... Tengo que acabar con su sufrimiento, por mi madre. ¿Me ayudáis?

Aceptar Rechazar

He descubierto que mora en el Jardín de los Muertos del Templo de Besmúndir bajo el nombre [%dic:STR_DIC_E_IDCatacombsN_DeathNightNmd_55_Ah], como centinela balaúr.

Liberadlo de su maldición, os lo pido por mi familia. Merece descansar en la Corriente de Éter.

Será un honor.

Sí... Ciertamente es mi deber liberar a mi tío de sus cadenas.

Es solo que no sé si estoy preparado para conocerlo, física o emocionalmente.

Rezaré a Lady Siel.

Haréis bien.

Habéis vuelto. Tal y como esperaba.

Me pregunto si no habría sido mejor ir con vos a verle. ¿Habría servido de algo o solo habría empeorado las cosas?

Ya es tarde para eso, ¿no?

Sí. Taros es libre.

Sí. Yo... Lo he podido sentir. Creo que mi madre se alegrará, aun habiendo perdido su mente en la Alianza dragoniana.

Habéis hecho un gran favor a mi familia. Haré lo que haga falta para compensar esta deuda con vos.

Entretanto, tomad estas botas. Y esto, es el libro en el que se describe a mi tío. Al menos su historia ha tenido un desenlace feliz.

Vencer a [%dic:STR_DIC_E_IDCatacombsN_DeathNightNmd_55_Ah] para liberarlo de su maldición ([%2]/1)

Hablar con [%dic:STR_DIC_N_Aurbotha]

Aurboza ha descubierto que su tío, un gran guerrero, estaba condenado a ser un muerto viviente por una maldición perpetua. Liberad a Taros Maldicevidas de su sufrimiento.

Aurboza encontró a un pariente al que daban por perdido, un gran guerrero llamado Taros al que un soberano balaúr había maldecido cruelmente.

Os dirigisteis al Templo de Besmúndir y liberasteis a Taros Maldicevidas de su estado de muerto viviente. Aurboza os agradeció mucho lo que hicisteis por su familia.

Nueva misión: [%questname] Activa: [%questname]