Saludos.
Ah... qué cansancio...
¡Oh, qué [%mainslotitem] tan formidable!
¿Qué se siente al luchar contra un enemigo con una cosa tan preciosa en la mano?
Seguro que es como estar en otro mundo, distinto a este, donde todo está tranquilo.
Daeva, ¿no puedo acompañaros aunque solo sea un día? Ah, sí... los animales...