Nos veremos a la luz de Ariel.
El desierto engulle cada vez más terreno. El territorio que rodea la fortaleza sigue siendo verde, pero ¿cuántos años pasarán hasta que también acabe cubierto de arena?
Debemos conservarlo, por el bien de toda Elísea. Al fin y al cabo, por algo somos Daevas.
Las fuentes mágicas de Lady Yustiel nos ayudarán a hacer retroceder el desierto.