Tengo buenas noticias para vos.
El Monasterio de Cáisinel, el soberano empiriano de la fantasía y el miedo, solicita vuestra presencia. La propia [%dic:STR_DIC_N_Eremitia], la suma sacerdotisa del espejismo, os ha dado la noticia.
El mensajero no se ha pronunciado acerca de los motivos. Pero dudo que tengáis algo que temer.
Daos prisa y utilizad la estatua teleportadora que se encuentra a la izquierda del [%dic:STR_DIC_FLA30]. Vuestra vacilación es una pérdida de tiempo.
Sois el[f:"la"] enviado[f:"enviada"] del comendador Lavirintos, ¿verdad? ¿El[f:"La"] que toma la iniciativa y protege Elísea del peligro?
No se os nota.
Sí. Debe de ser eso.
Tengo una petición. Podría ser el trabajo idóneo para un[f:"una"] joven Daeva en ciernes, que tenga que demostrar su valía. Podríais ser vos, ¿no?
Probablemente no sabréis que el soberano empiriano Cáisinel no se encuentra aquí en este momento. Está combatiendo en Ínguison. Allí el éter es claramente insuficiente. Iréis a ayudarlo.
Hablar con el comendador [%dic:STR_DIC_N_Lavirintos]
Ir al [%dic:STR_DIC_W_LC2] y hablar con la suma sacerdotisa [%dic:STR_DIC_N_Eremitia]
Orden: Lavirintos, el comendador de la Sagrada Orden de Miraju, os está buscando. Id a Sánctum y localizadlo.
El comendador Lavirintos de Sánctum solicitó vuestra presencia porque Eremitia, la suma sacerdotisa del espejismo del Monasterio de Cáisinel, os estaba buscando.
Os ordenó ayudar en la batalla de Ínguison, en la que combate el mismísimo Lord Cáisinel.