Queridos compañeros y compañeras de la Orden del alabastro:
La mismísima Sánctum nos ha rogado hoy que evitemos el caos y protejamos Elísea frente a una catástrofe asegurada.
Una agrupación desconocida ha distribuido un peligroso mineral por Jeirón. Parece un mineral común, pero daña los dispositivos de transporte aéreo y del campo etéreo.
Pedimos a todos los miembros de la Orden del alabastro que eliminen el [%dic:STR_DIC_OBJ_FOBJ_Q35009] e informen inmediatamente a un [%dic:STR_DIC_E_35007].
¡Por Elísea y por Sánctum!
¿Qué tal os ha ido? ¿Pudisteis cumplir la orden que dictaba la carta y resolver la situación?
Os acompañaría de buena gana al campo de batalla, pero ¿quién coordinaría los informes si lo hiciera?
Seguid así, [%username]. Con vuestro esfuerzo, Elísea es un lugar más seguro para todos.
Contad con recibir más misiones de la Orden del alabastro. En medio de este caos, los poderes malignos planean sus próximos pasos.
Destruir [plur][%dic:STR_DIC_OBJ_FOBJ_Q35009] ([%2]/3)
Dar parte a un [%dic:STR_DIC_E_35007]
Ha llegado un mandato de la Orden del alabastro. Seguid las instrucciones que dicta.
Según una carta de la Orden del alabastro, una agrupación desconocida estaba distribuyendo una sustancia sospechosa que perjudica los dispositivos del transporte aéreo y del campo etéreo.
Destruisteis el mineral caótico e informasteis a Aisquiolos. Aisquiolos os advirtió de que os esperarían más misiones.