Jurados:
Los últimos sucesos han diezmado nuestras reservas de hierbas medicinales. De momento tenemos suficientes, pero debemos aumentar sin falta nuestras reservas de cara a futuros enfrentamientos, sobre todo teniendo en cuenta las últimas interrupciones de nuestras líneas de suministros.
Se pide a todos los Jurados que entreguen toda la [%dic:STR_DIC_G_QUEST_45034_a] que recolecten. Esta hierba tan común es la base para elaborar sustancias medicinales. Llevad todo lo que haya disponible a [%dic:STR_DIC_N_Columba], que se encargará de almacenar las reservas.
Sangre por sangre, Guardia.
No contaba con que nuestros enfrentamientos con los Leparistas fueran a ser tan sangrientos como para necesitar tantas pociones. Más bien creía que la situación podría resolverse de forma más pacífica...
Pero no sirve de nada especular... No estoy al tanto de todas las actividades de los Jurados. Lo que necesitamos ahora es Rupina para poder hacer acopio de pociones. ¿Tenéis vos ahí?
Digo yo que alguna vez habréis utilizado hierbas curativas para sanar vuestras heridas, ¿no? Entonces seguro que sabréis que incluso con dosis mínimas de hierbas se puede aliviar el dolor y sanar las heridas. Así que cada brizna de hierba cuenta.
Podemos seguir chachareando sobre líneas de suministro o podéis dedicaros a conseguir algo de [%dic:STR_DIC_G_QUEST_45034_a]. ¿Qué creéis que sería más útil ahora mismo, [%username]?
Está claro: ¡ponerse en marcha!
Ah, gracias por vuestra ayuda, [%username].
Cada aportación, por pequeña que sea, cuenta muchísimo. Quien quiera ganar una guerra, debe vencer también en los pequeños combates. Algunos son tan pequeños que pasan desapercibidos para la mayoría...
Sea como sea, tomad esta recompensa por vuestros esfuerzos de hoy.
Reunir [%dic:STR_DIC_G_QUEST_45034_a] y llevársela a [%dic:STR_DIC_N_Columba]
[%collectitem]Ha llegado una carta de los Jurados. Seguid sus indicaciones.
Una carta pedía a todos los Jurados que recolectasen Rupina para aumentar las existencias de medicamentos de los Guardias.
Recolectasteis Rupina y se la llevasteis a la Jurada de Beluslan, que os recompensó por vuestros esfuerzos.