¡Hirau banan!
¿Os preocupáis también por tener buena salud?
No hay ningún motivo y tampoco queda tiempo para ocuparse de otras cosas.
Hasta que no haya llegado la orden de acabar con los soldados de Beritra, bastará con que nos ocupemos de los enemigos que tenemos delante de las narices.
Creo que no hay que pasar el día soñando como hacen algunos.
Cuando pienso en Elta, que está ensimismado con pensamientos inútiles, me subo por las paredes. Es insoportable.