(Es una [%dic:STR_QUEST_1965a] adornada. Está perfectamente equilibrada y la empuñadura adornada desemboca en una hoja afilada que parece cantar cuando se blande).
(En la empuñadura hay una pequeña etiqueta con la siguiente inscripción: "Destino: Fortaleza de Téminon, Resanta").
(Parece que habéis recibido la espada por error. El auténtico destinatario debe de estar en el Abismo esperándola en vano. Tal vez deberíais llevársela al intendente [%dic:STR_DIC_N_Clatanan], que está en [%dic:STR_DIC_W_AB1]).
Se nos agota todo: ¡las armas, las armaduras y todo lo que necesitamos! Ya he escrito a Sánctum para solicitar suministros, pero pueden pasar días, si no semanas, hasta que recibamos respuesta.
Ahora incluso ofrecemos recompensas a quienes nos dejen su equipamiento. ¡Esto es increíble! ¡Somos uno de los destacamentos más importantes de la guerra y tenemos que pedir ayuda a la población!
Nuestro estado es lamentable y vos seguro que solo estáis aquí para ver de qué os podéis incautar...
¡Debo disculparme con vos, [%userclass]! Debéis saber que aquí llegan todos los días Daevas que, pese a nuestras quejas, solo piensan en ellos mismos. Os había prejuzgado equivocadamente.
¡Esta espada es de una calidad extraordinaria! Es justo el tipo de arma que buscábamos a la desesperada y, en vez de nuestros nobles o de nuestros ricos comerciantes, nos la trae un[f:"una"] humilde [%userclass].
Os lo agradezco mucho, querido[f:"querida"] amigo[f:"amiga"].
Llevar a [%dic:STR_DIC_N_Clatanan] la Espada de titanio
Como sus existencias de armas están bajo mínimos, los intendentes del Abismo se ven obligados a recompensar a todo aquel que les pueda suministrar equipamiento. No sería mala idea llevar la Espada de titanio a la Fortaleza de Téminon.
La recompensa que obtuvisteis por concluir vuestra misión de artesanía era precisamente el tipo de espada que hacía falta en el Abismo.
Llevasteis la espada a Clatanan, que os lo agradeció profundamente.