¡Bienvenido[f:"Bienvenida"], Daeva!

Al conversar con los Daevas, probablemente os hayáis dado cuenta de que tienen la costumbre de quejarse continuamente.

Sin embargo, quejarse sobre la propia situación no ayuda mucho.

¿Sobre la aridez de este lugar? ¿Sobre las criaturas que aquí habitan? Es evidente que yo también estoy al tanto de las molestias que sufrimos.

Sin embargo, quejarse no sirve de nada.

Ha llegado el momento de dejar de lamentarse y actuar de una vez.

¡Hasta pronto!