¡Que Ariel os proteja!
Nunca revelaría información militar, pero a veces es difícil no reírse de las conversaciones entre el general de brigada y el centurión.
Hoy le ha dicho el centurión Malónimo al general Telémaco: "Menos mal que los Daevas tenemos alas, porque si no, los de piernas CORTAS se agotarían demasiado rápido persiguiendo al enemigo".
Gracias a los soberanos serafines, el general de brigada hizo oídos sordos a esta impertinencia. Si no lo hubiera hecho, habrían acabado peleándose.