[%username], hasta ahora, vuestros progresos han sido realmente sorprendentes, pero seguro que obtuvisteis algo de ayuda en el viaje que habéis hecho hasta el momento. Y para las pruebas que tenéis ante vos necesitaréis más ayuda.
No basta con armaros para la próxima prueba, también tenéis que protegeros.
Para ello visitaréis a algunos viejos amigos.
Vuestro viaje a Caramatis requiere un hechizo de protección enormemente poderoso. Hablad en primer lugar con Daminu, Lodas y Arbolu para obtener su bendición.
A continuación, visitad a los protectores del campo etéreo, y después a los Daevas con capacidades especiales. Haced que cada uno de ellos bendiga esta canica.
Es un largo viaje, lo sé, pero debería merecer la pena tanto para vos como para ellos. Al igual que cuando obtuvisteis vuestro primer anillo en Sánctum, obtendréis fuerza de todos nosotros.
¡Daeva!
Vuestros días aquí... acabaron hace mucho tiempo... Pensé que.. os habíais olvidado, pero... aquí estáis. Vuestra compañía... me reconforta.
¿Pero por qué... habéis vuelto?
¿Mi bendición?
Entonces... ¿fuisteis escogido[f:"escogida"]? El aire trae... frío y miedo que afloran durante la noche. Algo es sospechoso, pero... saber que sois vos el[f:"la"] que pondrá fin a nuestros temores... me tranquiliza.
Tenéis mi bendición. Defendeos... con su fuerza.
Ah... el[f:"la"] pequeño[f:"pequeña"] recadero[f:"recadera"] regresa.
Tengo una gran deuda con vos, Daeva. Gracias a vos... aún soy... el soberano del bosque...
Conozco... vuestro destino, Daeva. Os vais a enfrentar a un poder oscuro y amenazador, un poder... ante el que muchos... la mayoría se rendirían. La mayoría... pero no vos.
Tenéis mi bendición... como la habéis tenido siempre. Que sea así... con todos los Elims...
Que la gran fuerza... de los bosques... os proteja.
Cuánto tiempo, Daeva.
¿Tenéis algún deseo para Arbolu?
Si vuestro mensaje no es desconsiderado, se lo transmitiré al gran ser.
Lord Arbolu os concede vuestro ruego. Aún recuerda cómo evitasteis el embrutecimiento de sus hermanos Elims.
Mostrad vuestra humildad y arrodillaos. Arbolu os concederá su fuerza.
¡Ah, ya os recuerdo! Evitasteis que los Leparistas hicieran saltar por los aires el Observatorio de Vérteron. Siempre fuisteis un[f:"una"] Daeva con objetivos claros.
Y bien, ¿qué os trae por aquí?
Como veo, lleváis con vos un recipiente para este poder. Vuestra misión debe de ser realmente sombría.
Que la bendición de los cinco soberanos empirianos y la energía etérea colmen el viaje de [%username].
Ya está hecho. Espero que esta fuerza alivie vuestra carga.
¡Sois vos! Los soberanos serafines deben de haber unido estrechamente nuestros destinos. ¡Realmente habéis ascendido mucho, [%username]!
Quizá mis obligaciones hayan frenado mi propia ascensión... en fin. Tengo mi sitio.
Seguro que no venís solo de visita. ¿Qué os ha traído hasta aquí?
Os estáis preparando para una misión muy difícil. ¡Os ayudaré en lo que pueda!
Gran Lord Aion, benditos soberanos serafines... tomad este regalo de mi éter y bendecidlo para [%username].
Ya está hecho, [%username]. Solo espero que sea suficiente.
Bienvenido[f:"Bienvenida"], [%username]. No he tenido oportunidad de agradeceros vuestra ayuda como es debido.
Gracias a vos, Teobomos es hoy otro imperio... incluso aunque no lo parezca a primera vista.
¿Puedo preguntar por qué habéis regresado?
Os ayudaré en lo que pueda, [%username], y me alegro de poder corresponder a vuestra amabilidad.
Vuestro rostro refleja una gran determinación. Espero que vuestros enemigos caigan ante vos.
Tomad. He añadido mi poder de éter al que vos ya habéis acumulado... en una considerable cantidad.
Ese es el problema de estos condenados Balaúres... no es posible tomarse más tiempo para saludar como es debido.
No os lo toméis como algo personal, [%username]. Incluso aunque me encontrara a mi querida y anciana madre deambulando por la ciudad, me limitaría a hacerle señas y a decirle que se armara.
¿Pero qué os ha traído hasta aquí?
Eso no es difícil. Lo haré enseguida.
Veo que tenéis una misión difícil ante vos. Me inclino ante vuestro sentido del deber; ante vuestra disposición a luchar en esta batalla hasta el final.
[%username], rezaré para que Aion conserve la fuerza y la nobleza de vuestro corazón.
Bienvenido[f:"Bienvenida"], [%username]. ¡Parecéis un escupitajo de Balaúr!
Quizá podáis recuperar vuestras fuerzas aquí en el Liceo.
Naturalmente. La misericordiosa Ariel siempre nos cuida... incluso aquella vez, durante la cumbre para la paz... ¡pero no fue su culpa!
Dejadme ver la canica. ¡Me recuerda a mi infancia! Ha pasado muchísimo tiempo...
¡Ah! Debería ser suficiente. Habéis recolectado mucho éter, [%username]. Debéis de dirigiros a las fauces de la muerte.
Lleváis mucho tiempo fuera, Daeva. Siempre habéis destacado, incluso entre otros Daevas.
Siempre estáis rodeado[f:"rodeada"] de un gran poder de éter, pero hoy percibo una tremenda tormenta de éter a vuestro alrededor.
¿Por qué habéis venido hasta aquí? ¿Tenéis algo que resolver en el Lago de Miraju?
Os daré toda la fuerza que pueda. Pero no olvidéis que la verdadera fuerza proviene del interior. Creed en vos.
Sed honrado[f:"honrada"] y perseverante, [%username]. Triunfaréis...
Bienvenido[f:"Bienvenida"] de nuevo, [%username]. Me avergüenza que Eltnen, pese a todo vuestro esfuerzo, aún no haya recuperado su esplendor.
Bien, ambos sabíamos que no ocurriría de un día para otro.
Solo desearía que mi éxito fuera tan impresionante como el vuestro. Habéis conseguido muchas cosas. ¿Qué os ha traído hasta aquí?
[%username], por muy difícil que sea vuestra misión, la cumpliréis. Creo en vos.
Vuestra victoria llegará sin esfuerzos. Que mi bendición os sea de provecho.
¡[%username]! Ya es hora de que me visitéis.
Siempre supe que algún día necesitaríais mi ayuda. Vuestro camino es diferente al de los demás Daevas.
Y ahora habéis venido. ¿Qué puedo hacer por vos?
Entonces, vos combatiréis contra los Balaúres, [%username]. Mi capacidad especial debilita las fortalezas de los Balaúres.
Dejad que me ponga mis guantes de la bendición. Han costado una fortuna. Malditos Sugos.
Que el destino os depare la victoria y la gloria, [%username]. ¡Lealtad y armas!
Aquí, en la Posada de Jamanoc, nos esforzamos por cumplir todos los deseos de nuestros huéspedes.
Y para invitados especiales como vos nos gusta superarnos a nosotros mismos, [%username].
¿Tenéis algún deseo especial para vuestra cena? Somos capaces de crear casi todo... salvo el fricasé de Balaúr.
Ajá, ¿hoy no vais a ser nuestro[f:"nuestra"] huésped? Es una lástima. Será un placer ayudaros con la escasa fuerza de la que dispongo.
Tomad. Si la utilizáis en el momento adecuado, esta energía podrá decantar el combate a vuestro favor.
Partid, venced a vuestros enemigos... y vuestro pasado.
Ajá. Imaginaba que erais vos. He sentido leves remordimientos de conciencia; algo que muy raras veces me ocurre.
Disculpad mi distracción. No esperaba volver a veros tan pronto.
¿Qué os trae de vuelta a este pequeño rincón del así llamado paraíso de Aion?
¡No, no, no! No quiero saber más. ¿Queréis mi bendición? Muy bien.
Aquí la tenéis. La bendición está en el interior. Espero que esta fuerza os ayude en vuestra misión.
Y ahora marchad. Yo me quedaré con mis recuerdos... y mi arrepentimiento.
¿Yo? ¿Os puedo ayudar en algo? ¡Solo soy un comerciante medianamente honrado!
¿Por qué creéis que puedo hacer algo por vos aparte de venderos este jarrón sugo algo roto? ¡Solo 12 Quinas!
Ejem... vale, vale. Conozco esa mirada. ¿Qué queréis de mí?
¡Qué idealismo! ¡Lleno de ambiciones de juventud! Una vez fui como vos.
Muy bien, dadme esa piedra, la bendeciré. Creo que recuerdo las palabras.
Qué locura. ¡Estos dedos siguen conservando su antigua velocidad! Tomad... ¿Ahora me permitís mostraros esta maravillosa alfombra de Huargo? ¡Solo 300 Quinas!
Eh, habéis vuelto, [%username]. Decidme, ¿habéis visto rostros familiares? Supongo que tenéis su bendición y su fuerza, ¿no es así?
Dejadme ver la canica y después podremos ponernos manos a la obra.
¡Magnífico! No basta con ser valiente: debéis creer más en vuestra causa que vuestros contrincantes en la suya.
Los numerosos amigos que habéis encontrado durante vuestros viajes os han dado una pequeña parte de sí mismos, al igual que vos les habéis dado una parte de vos.
¡Ahora veréis cómo las pequeñas contribuciones pueden mover el mundo!
Hablar con [%dic:STR_DIC_N_Pernos]
Recibir la bendición de [%dic:STR_DIC_N_Tree_NoMove_Daminu] [%5]
Recibir la bendición de [%dic:STR_DIC_N_Tree_NoMove_Lodas] [%8]
Recibir la bendición de [%dic:STR_DIC_N_Pacerta] [%11]
Recibir la energía de [%dic:STR_DIC_N_Klitie] [%14]
Recibir la energía de [%dic:STR_DIC_N_Aeolus] [%17]
Recibir la energía de [%dic:STR_DIC_N_Atropos] [%20]
Recibir la energía de [%dic:STR_DIC_N_Aphesius] [%23]
Recibir la energía de [%dic:STR_DIC_N_Jucleas] [%26]
Recibir la bendición de [%dic:STR_DIC_N_Morai] [%29]
Recibir la bendición de [%dic:STR_DIC_N_Gaia] [%32]
Recibir la bendición de [%dic:STR_DIC_N_Kimeia] [%35]
Recibir la bendición de [%dic:STR_DIC_N_Jahmanok] [%38]
Recibir la bendición de [%dic:STR_DIC_N_Serimnir] [%41]
Recibir la bendición de [%dic:STR_DIC_N_Maximus] [%44]
Llevarle la canica a [%dic:STR_DIC_N_Pernos] en Porta
Necesitáis un hechizo de protección potente antes de ir a Caramatis. Impregnad la canica que os ha entregado Pernos de la bendición de aquellos que encontrasteis en vuestros viajes.
Pernos os hizo saber que la protección es tan importante como un arma.
Visitasteis a los Elims, a los protectores del campo etéreo y a Daevas únicos, y almacenasteis su bendición y su energía etérea en la canica que os entregó Pernos.
A vuestro regreso meditasteis en cuántas vidas habíais influido y cuántas os habían influido a vos. Pernos se alegró de ello y os dijo que ayudaría a fortalecer vuestra fe antes de la batalla.