Rezar puede ayudar, pero no en todas las situaciones de la vida, [%username]. Todos los asmodianos lo saben. Saben que a su cuerpo y a su espíritu se les exige mucho.

De todos modos, vuestra entrega debe ser recompensada. Reunid monedas por vuestras hazañas y podréis elegir una recompensa.

En este momento podéis escoger entre un arma única, un arma legendaria, una armadura única y una armadura legendaria.

Vengo a por un arma única. ¿Cuánto cuesta un arma legendaria? Quiero una armadura única. Estoy aquí porque quiero una armadura legendaria.

Un arma única cuesta 2000 Monedas de platino, pero merece la pena sin lugar a dudas.

Vuestros golpes, que suelen resultar más bien ridículos comparados con los de los gladiadores y los asesinos de este mundo, estarán dotados de una impresionante contundencia..

¿Tenéis las monedas, [%username]? Muy pocos tienen suficientes y es por eso que no se ven armas de este calibre por ningún sitio.

Sí, aquí tenéis. Dejad que me lo piense.

Un arma legendaria cuesta 400 monedas. Es una cantidad considerable, pero funciona como una buena criba porque solo aquellos que se lo merecen deben obtener lo mejor de lo mejor.

¿Os lo merecéis vos, [%username]? ¿Tenéis 400 monedas?

Las tengo, aquí tenéis. Me gustaría replantearme las posibilidades que tengo.

No me sorprende. No obstante, solo puedo entregaros una armadura única si me dais 1000 Monedas de platino.

Es una cantidad alta, pero debéis entender que esta armadura es algo más que un simple trozo de material unido de cualquier manera. Confiere a su portador una enorme fuerza. Refuerza el canto y la bendición de sus propietarios y los protege de manera óptima en la batalla.

¿Tenéis las monedas, [%username]?

Sí, aquí están. Me gustaría pensármelo un momento.

Entonces debéis de tener 200 Monedas de platino.

La armadura legendaria os conferirá más fuerza y os hará indestructible. Su precio se encarga de que solo la obtengan los Daevas perseverantes.

¿Tenéis las monedas? Entregádmelas, entonces.

Aquí tenéis. Esperad, me gustaría replantearme mi elección.

¡Aquí está vuestra arma! Rebosa de pura contundencia, ¿no creéis?

Los Daevas como vos no son descuidados. Por eso sé que la trataréis de manera adecuada. Recordad que este ejemplar especial necesita más cuidados que la mayoría de armas. Su efectividad depende de su equilibrio interno, ¿entendéis?

Mi más sincera enhorabuena por la obtención de esta arma. Se convertirá en un símbolo de vuestra firmeza; en un símbolo en el que otros podrán reconocer que os habéis dejado la piel por Asmodia.

¡Os la habéis ganado! ¡Aquí está vuestra arma!

Tratadla con cuidado, [%username]. Vuestra entrega por Pecherolin se ve por fin reconocida. Solo espero que otros demuestren un compromiso tan profundo como el vuestro con nuestra causa.

¡Sangre por sangre!

¡Perfecto!

Aquí está vuestra armadura. Como ya os dije, no es un simple trozo de material unido de cualquier manera. Os salvará la vida incontables veces.

Que os divirtáis mucho con vuestra recompensa, [%username]. Os la habéis ganado.

Bien. Aquí está vuestra armadura.

Os la habéis ganado, [%username]. Habéis hecho un trabajo estupendo por Pecherolin.

Sangre por sangre.

Lo siento, [%username], pero no puedo ayudar a los [plur][%userclass] como vos.

Para recibir vuestras recompensas tenéis que dirigiros a Náguel, Bern o Hubat.

Gracias por vuestro duro trabajo, [%username]. Habéis ayudado a proteger Pecherolin de los elios y de los Balaúres, pero todavía queda mucho por hacer.

Que disfrutéis la recompensa. Si tenéis tiempo, estaríamos encantados de que os quedarais para seguir defendiendo nuestra tierra.

No tenéis suficientes monedas, amigo[f:"querida"] mío[f:"amiga"]. No puedo daros la recompensa que deseáis si no tenéis la cantidad exacta.

Seguid trabajando para Pecherolin y obtendréis vuestra recompensa. Sabed que la clave del éxito es la paciencia. Tenéis que aprender a apreciar las cosas que os habéis ganado. Los obsequios no significan nada, mientras que las recompensas, sí.

Sangre por sangre.