Hubo un tiempo en que soñé con convertirme en un fabricante extraordinario algún día.

No tengo habilidades para la guerra y sé trabajar con las manos, así que me parecía obvio convertirme en un gran fabricante. No obstante, hay tantos fabricantes maravillosos que he dejado de intentarlo.

Ahora vendo mercancías que los fabricantes necesitan. Uno debe hacer lo que le permitan sus habilidades.

Comprar objetos Vender objetos

¿Qué puedo hacer por vos?

(Termináis la conversación).