Saludos.
Eh, Daeva, ¿tenéis un Quina para mí?
Os vendo este escarabajo por un Quina. ¡No, por cin... cien!
Mi madre es muy mala... No me da Quinas ni cuando me porto bien.
Pero necesito unos pocos para comprar un Pagati. ¡No, mejor dos! ¡Cien!