Ser un espíritu sin forma, condenado a merodear por este mundo hasta encontrar un poco de paz para aliviar el dolor de su alma vejada, también tiene sus ventajas.

Por ejemplo, es increíblemente fácil espiar a los Balaúres.

¿Habéis descubierto algo interesante?

He encontrado unos huevos extraños. Hasta ahora no sabía que los Balaúres ponían huevos y en realidad no quiero ni pensarlo.

Sea lo que sea lo que salga de ellos, no puede ser bueno. Tenemos que ocuparnos del asunto. ¿Me ayudaréis?

Pero todavía no he elaborado ningún plan.

Aceptar Rechazar

Debemos examinarlos más de cerca y averiguar qué contienen. Traédmelos.

¡No los rompáis, por favor!

Ha quedado claro...

No puedo obligaros a ayudarme.

Lo siento.

¿Habéis traído los [plur][%dic:STR_DIC_OBJ_DragonEgg_Q2672]?

Tomad.

Os pedí que hicierais algo, ¡así que hacedlo! ¡Si seguís por ese camino, os atacaré!

¡Está bien, está bien!

Ponedlos aquí. Cuando regreséis a la fortaleza, enviad a alguien para que los recoja y puedan ser examinados.

Me he dado cuenta de que ya no puedo escribir cartas y de todas formas el buzón está roto. Quién sabe si vendrá alguien a recoger el correo.

Recolectar los [plur][%dic:STR_DIC_OBJ_DragonEgg_Q2672] y llevárselos a [%dic:STR_DIC_N_Gwendolin]

[%collectitem]

En el Cuartel de Bacarma hay unos huevos sospechosos. Recolectadlos y llevádselos a Gwendolin.

Gwendolin dijo que era beneficioso ser un espíritu porque se podía espiar muy bien. Había descubierto unos huevos sospechosos en el Cuartel de Bacarma y os pidió que se los llevarais. Y así lo hicisteis.

Nueva misión: [%questname] Activa: [%questname]