¿Habéis traído monedas? ¿De qué tipo? ¿Cuántas?

Las Monedas de oro os aportarán recompensas mejores que las de plata y cuantas más tengáis, mejor será la recompensa.

Dispongo de objetos para hechiceros, invocadores, clérigos y cantores.

Tengo 10 Monedas de oro. Tengo 20 Monedas de oro. Tengo 8 Monedas de plata. Tengo 16 Monedas de plata.

¡10 Monedas de oro! ¡Excelente!

Las monedas que me habéis traído simbolizan vuestro trabajo por el bien de Sánctum y Elísea. Espero que vuestra recompensa os preste un buen servicio cuando combatáis por la gloria de la luz.

¡Lealtad y armas!

¡20 Monedas de oro! ¡Asombroso! Son muy pocos los que consiguen reunir 20 monedas.

Estas monedas son la prueba de vuestra lealtad, [%username]. Espero que os guste la recompensa que os ofrezco como muestra del agradecimiento de Sánctum, Elísea y la soberana Ariel.

Que su luz os proteja.

Así que habéis reunido 8 Monedas de plata. ¡Buen trabajo!

Tengo una recompensa para vos, pero si me pudierais traer 16 de esas monedas, os correspondería algo mejor.

Bueno, aquí tenéis vuestra recompensa, [%username].

¡Seguid así!

¡16 Monedas de plata! Seguro que habéis tenido que trabajar duro para conseguirlas, [%username]. Permitidme que mire qué recompensa os corresponde...

Ah... sí. Esto podría ir con vos. ¡Utilizadlo con la bendición de Ariel!

Lo siento, pero no tengo recompensa que daros, [%userclass]. Tenéis que ir a ver a Maquidna.

Id con la luz de Ariel.

Si me traéis 10 o 20 Monedas de oro u 8 o 16 Monedas de plata, os haré entrega de una recompensa con mucho gusto.

Los esfuerzos que habéis puesto al servicio de Elísea deben verse recompensados. Que la luz de Ariel os acompañe.

Recibiréis una recompensa a cambio de cierta cantidad de Monedas de oro o de plata.

Así que si me traéis 10 o 20 Monedas de oro u 8 o 16 Monedas de plata, me encargaré de encontrar lo más apropiado para vos. Lealtad y armas, [%username].