¡Asfelumbra!
¡Tengo mucho que hacer, qué locura! Debo ocuparme de las investigaciones y de los suministros a la vez sin descuidar las obligaciones de lucha, además de realizar operaciones de abastecimiento... ¡Voy a enloquecer!
El trabajo me desborda por completo, pero ¿quién iba a hacer todo esto si no?
Sinya y Glati piensan que ya tienen bastante con sus propias obligaciones.