¿Qué ocurre?

En realidad, en Gelcmaros solía recopilar información.

Como allí hay escasez de energía etérea, las posibilidades son muy limitadas para todo.

Cuando Estelman me preguntó si quería trabajar en Cantalón, le dije que cualquier sitio era mejor que Gelcmaros, y así es como he llegado hasta aquí.

Pero ahora lo que más deseo es poder regresar a Pandemónium.

(Termináis la conversación).