¿Seguís decidido[f:"decidida"] a convertiros en templario[f:"templaria"] de la Sagrada Orden de Miraju?

Pondremos a prueba vuestra capacidad de combate, vuestra paciencia y vuestro valor. En la primera prueba se medirá vuestra destreza a la hora de luchar.

Cómo no, en Sánctum ya se habla de ella, pero ahora tendréis que demostrarla según nuestra tradición.

¿Vuestra tradición?

Los templarios de Miraju no luchamos por gusto, sino para defender el futuro de Atreia.

Para superar la prueba tendréis que contribuir de forma similar. Es vuestra oportunidad de demostrar al mismo tiempo vuestra capacidad de lucha y vuestra entrega al pueblo de los elios.

¿Estáis dispuesto[f:"dispuesta"] a hacer la prueba?

Aceptar Rechazar

Convertirse en templario de Miraju es como transformarse en un rayo de luz que ilumina toda Elísea.

Tenéis que expulsar a todos los enemigos que amenacen no solo a Sánctum, sino a cualquier lugar de Elísea que solicite vuestra ayuda.

He informado a [%dic:STR_DIC_N_Phoebe] de que sois nuestro[f:"nuestra"] aspirante más reciente. Ella os explicará los detalles del encargo.

¡Miraju resplandece!

Mmm... Teniendo en cuenta lo que se vanaglorian la mayoría de los aspirantes de su capacidad de combate, raras veces tengo que convencerlos de que den este primer paso.

Pero vos no sois como la mayoría de los aspirantes, [%username].

Regresad cuando estéis dispuesto[f:"dispuesta"].

Volveré.

Muy pocos Daevas han superado la prueba de la Sagrada Orden de Miraju. Incluso puedo recordar los nombres de la mayoría.

Veamos si recordaré vuestro nombre también.

Comenzaremos con un acertijo: se entrega por voluntad de los cinco soberanos serafines, es una recompensa por un gesto altruista y se denomina "Gloria de los Daevas"; ¿qué es?

Una medalla.

Exacto: una medalla es un símbolo que demuestra que se ha luchado por la justicia.

Todos pueden ver lo que ha logrado quien la porte tan solo con mirar la insignia.

Bueno, id a ver a [%dic:STR_DIC_N_Jupion]. Ella os dirá qué medallas necesitáis para superar esta prueba.

¡Lealtad y armas!

Los aspirantes parecen ser cada vez más jóvenes. Probablemente ni siquiera vivierais la Gran Catástrofe, ¿cierto?

Oh, vos sois aquel[f:"aquella"] que no tenía memoria... ¿Quién sabe? Puede que incluso seáis mayor que yo, ¿no?

Sea como sea, yo también tengo un acertijo: ¿qué lugar era el centro de la antigua Atreia, la región que exploró el primer discípulo de Siel y concentra la sabiduría de los cinco soberanos serafines?

Es Sánctum, ¿verdad?

Un[f:"Una"] Daeva debe conocer la historia de nuestro pueblo, sobre todo si no puede recordar directamente los hechos históricos.

Pero basta ya de charlas. Visitad a [%dic:STR_DIC_N_Ladisil], la última persona a la que podéis pedir consejo para esta prueba.

¡Lealtad y armas!

Puesto que ya habéis visitado a Etamirel y a Jupiona, podréis contestar la última pregunta que os voy a hacer.

Combinad las dos palabras gloriosas que habéis dicho como respuestas a vuestros acertijos.

La expresión resultante os indicará lo que tenéis que obtener en esta misión.

¿Medallas de Sánctum?

¡Exacto!

La [%dic:STR_DIC_I_quest_3935a] se creó originalmente para condecorar por la construcción de Sánctum.

Los elios pudimos librarnos del caos tras la Gran Catástrofe y recuperar la esperanza precisamente gracias a la construcción de Sánctum.

Por eso esta medalla es especial. ¿Cómo explicároslo? Es un tipo de orden del mérito.

Por eso para superar la prueba de la Sagrada Orden de Miraju hay que haber recibido primero 10 Medallas de Sánctum.

Así que id a hablar con [%dic:STR_DIC_N_Dairos] o [%dic:STR_DIC_N_Iocaste] para que os digan qué tenéis que hacer para conseguir las Medallas de Sánctum.

¡Miraju resplandece!

¡Vaya! ¿Ya habéis reunido suficientes [plur][%dic:STR_DIC_I_quest_3935a]?

Sabía que lo conseguiríais, pero me sorprende que lo hayáis hecho tan pronto.

¿Podéis darme las medallas que habéis obtenido? Quiero verlas con mis propios ojos.

Aquí las tenéis.

Hay muy pocos aspirantes que consigan llegar tan lejos y se consuelan con ser al menos héroes de Elísea, aunque no ingresen en las filas de la Sagrada Orden de Miraju. En cambio, vos estáis en continuo ascenso. Cada vez me parecéis más de confianza, [%username].

Esta piedra, también conocida como Piedra de la gloria, es una prueba de una contribución. Se utiliza en muchos símbolos, pues su composición y su forma no cambian por mucho tiempo que pase.

Ahora tenéis que visitar a [%dic:STR_DIC_N_Jucleas], dejar que realice el ritual de admisión y llevarle la Piedra de la gloria al comendador [%dic:STR_DIC_N_Lavirintos].

¡Miraju resplandece!

Ah, no tenéis suficientes medallas.

Sería mejor si estuvieseis aquí por otra cosa.

Traedme 10 [plur][%dic:STR_DIC_I_quest_3935a] la próxima vez que vengáis a verme.

¡Esforzaos un poco y las reuniréis en seguida!

Enseguida vuelvo.

¿Entonces habéis completado la tarea con éxito?

Os habría ayudado de buen grado, pero la prueba de la Sagrada Orden de Miraju es muy estricta. Si uno no la supera por sus propios medios, le pueden descalificar.

Pero vos habéis conseguido las 10 Medallas de Sánctum sin mi ayuda.

Estoy preparado[f:"preparada"] para el ritual de admisión.

Por supuesto; lo haré inmediatamente, [%username].

Mostradme la Piedra de la gloria.

Aquí está. ¿La Piedra de la gloria? Volveré enseguida.

Os acostumbraréis a traerla tras varios intentos: siempre que vengáis a verme como aspirante tendréis que darme una de esas piedras.

Haceos con una Piedra de la gloria y, por favor, no os quejéis de lo difícil que es conseguirla: ya lo he oído demasiado.

Volveré.

Arieluma, aspirante.

Veo que venís sonriente.

La verdad es que yo también tengo ganas de sonreír.

He conseguido la gloria eterna.

¡Excelente! Habéis dado otro paso para vuestra admisión. Os hago entrega de unas hombreras.

Llevadlas con orgullo: demuestran a todos que la Sagrada Orden de Miraju está satisfecha con vuestros esfuerzos.

Hablar con [%dic:STR_DIC_N_Phoebe]

Hablar con [%dic:STR_DIC_N_Jupion]

Hablar con [%dic:STR_DIC_N_Ladisil]

Reunir las [plur][%dic:STR_DIC_I_quest_3935a] y llevárselas a [%dic:STR_DIC_N_Ladisil]

[%collectitem]

Comprar una [%dic:STR_DIC_I_relic_01], llevársela al sumo sacerdote [%dic:STR_DIC_N_Jucleas] y pedirle que realice el ritual de admisión

Hablar con [%dic:STR_DIC_N_Lavirintos]

Según Lavirintos, antes de entrar en la Sagrada Orden de Miraju tenéis que poner a prueba vuestra fuerza de combate. Reunid Medallas de Sánctum para demostrar vuestra valía y recibir una Piedra de la gloria.

Lavirintos os dijo que teníais que superar la prueba tradicional de combate para que os aceptasen en la Sagrada Orden de Miraju.

Visitasteis a Etamirel, a Jupiona y a Elizar, que os explicaron que teníais que conseguir Medallas de Sánctum para demostrar vuestras capacidades. Le llevasteis las insignias a Elizar, que os dio la Piedra de la gloria y os encargó que llevarais a cabo el ritual de admisión y que después visitarais a Lavirintos.

Cuando completasteis todos los pasos, el comendador os dio las hombreras de la Sagrada Orden de Miraju.

Nueva misión: [%questname] Activa: [%questname]