¡Por la prosperidad de Pandemónium!

En Atreia siempre os orientáis bien. Solo necesitáis saber en qué dirección está el Norte. Pero claro, en el Abismo es mucho más complicado.

No solo tenéis que pensar en la dimensión vertical, sino también en cuánto podéis volar. Si os cansáis de correr, podéis parar y tomar aliento, pero si sobrestimáis vuestra capacidad de vuelo, podría ser mortal.

Que las sombras os amparen.