¡Saludos, Daeva!

Un Daeva que no puede disfrutar del festival del centenario no es un Daeva, ¿cierto?

Se quiera o no, después de la fiesta hay que volver a la vida cotidiana.

Quién sabe cuándo volveremos a celebrar el próximo festival del centenario.

¡Disfrutad del momento!

¡Hasta pronto!