Algunos de los detonantes más habituales para una ascensión a Daeva son las crisis personales o los traumas psicológicos graves. Es como un segundo nacimiento, solo que, en este caso, sois vos quien sufre los dolores correspondientes, en lugar de vuestra madre.
Disculpad mi curiosidad, joven Daeva, pero ¿qué fue exactamente lo que provocó vuestra ascensión?
¿Habéis ascendido por Munin? Eso complica las cosas... De hecho, diría que las complica mucho...
Como [%userclass], seguro que sabéis que los nombres tienen cierto peso, ¿no? Sería mejor para vos que no mencionaseis el nombre de Munin en Pandemónium.
Ese hombre tiene muchos enemigos que finalmente lo enviaron al exilio y tacharon su nombre de los anales de la historia... Y todo por su profecía acerca del decimotercer soberano empiriano.
Una ridícula ilusión, nada más. No le deis muchas vueltas.
Mejor será que os dediquéis a una realidad de extrema urgencia... Vuestra magia indómita se os escapará de las manos y os morderá el trasero si no conseguís tenerla bajo control total.
Muchos Arcontes esperan que perdáis el control y yo me alegraré de poder reprocharles sus palabras cual espejo de la vergüenza. Esta es vuestra oportunidad: se os destinará al Fuerte de Guardiavieja.
Para los que acaban de aprender a nadar, como vos, el Fuerte de Guardiavieja debe de ser como nadar por fin en la parte profunda de la piscina... Supongo que debéis agradecer vuestra suerte a cierta figura turbia de vuestro pasado más reciente.
Mejor será que no hagáis un número por este tema... Al fin y al cabo, es Guardiavieja, no el Abismo. Si alguien os pregunta, decidle tan solo que aprovecháis cualquier ocasión para crecer en circunstancias adversas... al más puro estilo asmodiano.
Creo que puedo leer vuestra respuesta en la expresión de vuestro rostro... pero debo preguntároslo: ¿os enfrentáis a vuestro primer puesto?
Id al [%dic:STR_DIC_W_DF1A_1] y entregad esta carta de recomendación al centurión [%dic:STR_DIC_N_Meibjar]: él os dará más instrucciones.
¿No habéis estado nunca en el Fuerte de Guardiavieja? Entonces hablad con [%dic:STR_DIC_N_Doman] en la puerta de Pandemónium; os teleportará al fuerte.
Ya tenéis una mancha en vuestro historial... y a su lado está el nombre de Munin. ¿En serio queréis seguir aumentando vuestra deshonra?
He visto a muchos Daevas jóvenes que han sido destinados a Guardiavieja; muchos de ellos no han regresado. Pero hasta el día de hoy aún no he visto a ningún Daeva que se escaquee de sus obligaciones. Vuestra cobardía es una vergüenza para todos los auténticos Daevas.
El Fuerte de Guardiavieja espera. Deberíais madurar lo antes posible.
Me alegra veros por fin, [%username]. Ya me preguntaba si... En fin, a veces los Daevas novatos no entienden la responsabilidad que conllevan esas alas.
¿Habéis dicho el Fuerte de Guardiavieja? Bien. ¡Más carne fresca para la picadora! Avisadme cuando estéis listo[f:"lista"].
Vaya, vaya, el[f:"la"] nuevo[f:"nueva"] Daeva de Pandemónium... Mmm. ¡Bienvenido[f:"Bienvenida"] al Fuerte de Guardiavieja!
Jáimdal ya me ha informado acerca de todo. Cree que os vendría bien que os echaran una mano. "Sed indulgente con [%username]", ha escrito. "Es relativamente inexperto[f:"inexperta"]. Ha ascendido hace poco".
El viejo Jáimdal se comporta bastante más como un padre que como un soldado.
Todas las formalidades están solucionadas. ¿El general de brigada Sutrán os ha dado vuestro correo? Deberíais recibirlo lo antes posible.
¡Daos prisa! ¿Acaso queréis oír el sermón moral de Sutrán?
Hablar con [%dic:STR_DIC_N_Doman] en la entrada de Pandemónium
Teleportaros al Fuerte de Guardiavieja y buscar a [%dic:STR_DIC_N_Meibjar]
Hablad con Veh y recibid vuestra primera misión como Daeva.
Cuando Veh os preguntó el motivo de vuestra ascensión, mencionasteis la profecía de Munin. Veh os aconsejó no mencionar el nombre de Munin en Pandemónium.
Os dio una carta de recomendación y os envió al Fuerte de Guardiavieja. Allí os encontrasteis con el centurión Meiyer.