Aquí sopla todo el rato.
Me tiembla todo el cuerpo por este intenso frío.
Además tengo las manos tan frías que apenas puedo sostener mi bastón.
Estoy esperando a mi hijo. ¡Cof, cof...!
(Secándose las lágrimas) Mi hijo dijo que vendría aquí.
Nuestra aldea natal... fue atacada... Desde entonces no lo he vuelto a ver...
Si mi hijo viene a Pandemónium, quiero ser la primera en saludarlo. Por eso lo estoy esperando aquí.
Ah, joven Daeva, gracias.
No deberíais malgastar vuestro tiempo en gente mayor como yo.
Pero... ¿Creéis que os sobra un poco de tiempo para conseguir un par de guantes para mis frías manos?
El viento gélido no me importa, pero tener las manos frías es insoportable. Cof, cof.
He oído que en [%shoplink] se pueden conseguir guantes gratis. Si no fuera tan mayor, lo intentaría yo misma...
Deberíais encontrarlos en [%shoplink].
No necesito guantes caros.
Os agradecería unos guantes sencillos de Cuero de brajo.
Sí... Deberíais iros.
Los Daevas como vos, que llevan a cabo semejantes hazañas, no deberían malgastar su tiempo con gente mayor como yo... Cof, cof.
Los jóvenes como vos sois mucho más rápidos que yo...
¿Tenéis los guantes que os he pedido? Cof, cof.
Lástima... Tenía demasiadas expectativas... ¿O es que os divierte burlaros de una anciana?
¿Habéis buscado en vuestro correo urgente?
Recordad que en [%shoplink] podéis conseguir los guantes gratis. Cof, cof.
Os lo agradezco mucho, joven Daeva.
(Sollozando) Viendo estos guantes no puedo evitar acordarme de mi hijo...
Siempre le hacía ropa de Cuero de brajo...
Gracias a vos siento una energía inexplicable en mí...
Tomad esto, por favor. Una anciana como yo ya no puede empezar nada, pero para vos estas cosas pueden ser útiles.
Conseguirle [%dic:STR_DIC_I_junk_world_event_webshop_02a] a [%dic:STR_DIC_NPC_event_Hinjel], que está tiritando de frío
[%collectitem]Llevadle a Jinyel Guantes de brajo para sus frías manos.
La anciana Jinyel ha perdido su casa y a su hijo. Pasaba el tiempo en la Puerta de Pandemónium esperando que su hijo regresara.
Tenía las manos heladas por el viento, así que le conseguisteis unos guantes de brajo. Os lo agradeció y os dio una generosa recompensa.