El ataque balaúr nos ha sorprendido. Han destruido el observatorio y nos han quitado la posibilidad de mantener el campo etéreo.

Para detener a los Balaúres, tenemos que impedirles que lleguen a Atreia. ¡Hay que volver a levantar el campo etéreo!

Lo más importante es reparar del todo el observatorio.

¿Cómo pretendéis hacerlo?

[%dic:STR_DIC_N_Gwendolin], la protectora del campo etéreo, sabrá qué hay que hacer. Esta muerta, pero como todo buen soldado asmodiano, no deja que eso le impida cumplir su deber.

¡Obligad a retroceder a los Balaúres! ¡Sangre por sangre!

¡Sangre por sangre!

Por fin han enviado refuerzos. ¿La fortaleza no podía haber enviado a alguien antes de que yo muriese?

En fin, quedarse aquí lamentándose no tiene sentido, así que manos a la obra.

¿Qué hay que hacer ahora?

Tenemos que reponer el éter del observatorio... y necesitamos mucho éter.

Para conseguir suficiente, vais a tener que ir hasta el Abismo.

Buscad a [%dic:STR_DIC_N_Herz] en el Embarcadero de Prímum. Decidle que necesitamos éter urgentemente.

Ya estoy en camino.

Saludos. ¿Habéis venido para apoyarnos en la lucha en el Abismo?

No, se trata de Beluslan...

Mmm... Creo que sé dónde podéis conseguir una pista sobre una gran acumulación de éter.

Hablad con [%dic:STR_DIC_N_Glati], en la isla Conflicto de Cracón.

Sangre por sangre, mi general.

¿Qué os trae hasta un lugar tan apartado como este? ¿Queréis derramar un poco de sangre balaúr?

Sí, pero no aquí...

Deberíais conseguir suficiente éter en la [%dic:STR_DIC_W_AB1_Sub_add20], pero tened cuidado y no os acerquéis demasiado.

¿Conocéis la historia de Ícaro? No seáis tan torpe como ese adorador del sol.

Aquí tenéis un recipiente. Que el destino os apoye.

Que la paz de la oscuridad sea con vos.

Huele a éter fresco...

¿Podéis oler el éter?

Por lo visto es uno de los efectos secundarios de ser un ente espiritual. Antes de reponer el éter del observatorio, tenemos que destruir los aparatos que lo aspiraron en un principio.

Quitad de en medio los [plur][%dic:STR_DIC_OBJ_DF3_DragonObelisk_Q2060] y luego deberíais conseguir poner otra vez en marcha el [%dic:STR_DIC_OBJ_DF3_Sanctuary_Q2060].

Por fin. Es hora de patear unos cuantos traseros escamosos.

¿Qué habéis estado haciendo tanto tiempo y por qué habéis vuelto con las manos vacías?

Para reconstruir el observatorio, necesitamos éter.

Id a Resanta y conseguidlo.

¡Sí, sí, está bien!

¡[%username]! ¡Informadme!

El campo vuelve a funcionar...

Buen trabajo. Nerita se alegará de oír que el campo vuelve a funcionar.

Tenemos que conseguir que vuelva a estar a plena potencia para que no se nos cuelen más largartijos asquerosos de esos. Pondré a Gwendolin a la tarea.

Hablar con [%dic:STR_DIC_N_Hod]

Hablar con [%dic:STR_DIC_N_Gwendolin]

Hablar con [%dic:STR_DIC_N_Herz]

Hablar con [%dic:STR_DIC_N_Glati]

Viajar hasta la [%dic:STR_DIC_W_AB1_Sub_add20], conseguir éter y llevárselo a [%dic:STR_DIC_N_Gwendolin]

[%collectitem]

Destruir los [plur][%dic:STR_DIC_OBJ_DF3_DragonObelisk_Q2060] de los alrededores del observatorio ([%17]/3)

Reparar el [%dic:STR_DIC_OBJ_DF3_Sanctuary_Q2060]

Dar parte a [%dic:STR_DIC_N_Hod]

Hablad con Hod sobre la reparación del observatorio dañado en Beluslan.

Hod os encomendó la misión de reparar el observatorio. Os encontrasteis con Gwendolin, el espíritu de la protectora del campo etéreo que murió en un ataque balaúr, y os dijo que había que conseguir éter del Abismo, destruir los aparatos de los Balaúres que interferían en el campo etéreo y volver a llenar de éter el observatorio. Después de haber cumplido la misión, disteis parte a Hod.

Progreso: [%questname]