Ahora mismo estoy ocupado vigilando el almacén, pero ¿qué os trae hasta mí?

Los guardas tienen que dar siempre lo mejor de sí mismos.

Hay Daevas que vienen a Balaurea con actitud negligente y no se toman en serio su labor como centinelas.

Estos Daevas sienten que ser guardas es un desprecio. Sin embargo, la labor de un guarda es tan importante como una labor de purificación.

Eso es especialmente cierto en un lugar como este, ya que tanto los elios como los Balaúres lo tienen en el punto de mira.

(Termináis la conversación).