El peregrino sospechoso me pide que le dé la Perla de vida.

No puedo huir por haberme roto el tobillo. Me alegro mucho de haber escondido la Perla de vida antes de que me encontrara.

Me ha dejado vivir, pero no sé cuánto tiempo podré sobrevivir. Me matará, le dé la Perla de vida o no.