Los Espíritus de agua y los Espíritus de viento del Lago de Miraju se han vuelto agresivos de repente, por motivos desconocidos.

Atacan a los peregrinos de camino al Santuario de Ardus. Intentamos informar a todos los peregrinos sobre este peligro y les recomendamos que se mantengan alejados del santuario.

En la Corriente de Éter no parece haber nada anormal y, a semejante distancia del bosque contaminado, es improbable que las sustancias tóxicas sean la causa.

Somos tan pocos que parece improbable que nuestras investigaciones vayan a arrojar algo de luz. Todos nuestros hombres están ocupados luchando contra los Espíritus.

Si la situación no mejora, tal vez sea aconsejable bloquear el Lago de Miraju y cerrar el acceso.