¡Saludos, Daeva!
Me ha ocurrido algo extraño en Sarpán.
Allí me encontré con un veterano de los reianos que en cierto modo me resultaba familiar.
Por eso me dirigí a él, pero él me pidió que me fuera si no tenía ningún motivo especial para hacerlo.
Tras regresar a Elian, reflexioné con mucha insistencia sobre por qué me resultaba tan conocido.
No sé demasiado sobre historia, pero pensé que probablemente nuestro destino común ya comenzara en la época del Atreia unida.
Le pregunté a Aion por ello, pero él respondió que eso era absolutamente imposible.
Sin embargo, no puedo dejar de pensar en ello.