Espero que tengáis un Cáliz primigenio para mí. Ya me he topado con demasiados Daevas que solo vienen aquí para chacharear.

¿Acaso tengo pinta de ser un consultorio sentimental? ¿Es que llevo un cartel que diga "paño de lágrimas, cuéntame tu vida"? ¿Mmm?

O bien me dais un cáliz y me dejáis seguir con mi trabajo o me dejáis en paz. Tengo papeleo que hacer.

Tengo aquí un Cáliz primigenio pequeño. Tengo un Cáliz primigenio normal. ¿Esto es un Cáliz primigenio grande? ¡He encontrado un Cáliz primigenio enorme!

Bueno, creo que os debo una disculpa. Vamos a ver qué habéis traído.

Mmm. Es de oro, eso está claro, aunque lo han aplastado hasta dejarlo casi plano. Me apuesto a que algún balaúr patoso lo pisó. No sería la primera vez.

Bueno, ¿qué puedo decir? Lo siento, [%username], no estoy frustrada sin motivo.

Veamos ese cáliz. Hmm, está en bastante buen estado... y aquí aún puede leerse parte de la inscripción. Lo enviaré a Sánctum. Tal vez nuestro departamento de restauración pueda eliminar parte de los desperfectos.

Os habéis ganado con creces vuestros puntos del Abismo, [%userclass].

Bueno... sí, ¡creo que puede ser bueno! Yo... creo que os debo una disculpa.

Madre mía... vaya pieza. El oro está casi intacto, las inscripciones son legibles en casi toda su totalidad y encima es bastante macizo.

Este es exactamente el tipo de cáliz que precisa Sánctum, [%username].

¡Válgame Aion! ¡Mirad esto!

Solo de pensar que algo tan magnífico estaba apilado sin más junto a basura, se me revuelve el estómago. Pero ahora no es momento de quejarse, volvemos a tener en nuestras manos uno de nuestros mayores tesoros, y todo gracias a vos.

¿Qué? ¿Esto es una broma? No intentéis dároslas de que habéis estado en la cámara del tesoro de los Balaúres, [%username].

Puede que tengáis músculos, pero comparado con los Daevas que han sobrevivido a algo así, no sois más que piel y huesos.

No os puedo recompensar por esto. Solo puedo recompensar a los que han recogido ellos mismos los Cálices primigenios.

¿Qué? ¿Esto es una broma? No intentéis dároslas de que habéis estado en la cámara del tesoro de los Balaúres, [%username].

Puede que tengáis músculos, pero comparado con los Daevas que han sobrevivido a algo así, no sois más que piel y huesos.

No os puedo recompensar por esto. Solo puedo recompensar a los que han recogido ellos mismos los Cálices primigenios.

Podría quedármela, pero seguro que eso no os gustaría. De momento, no puedo daros más puntos del Abismo, pero si perdéis puntos u os hacéis más fuerte, ya sabéis dónde encontrarme.

Me pregunto por qué los Balaúres tienen tanto interés en conservar nuestros antiguos artefactos. La respuesta más obvia sería la investigación, pero, ¿acaso esas bestias de pesadilla tienen la inteligencia necesaria para ello?

Tantas preguntas que probablemente queden sin responder para siempre. Sin embargo, recuperar nuestros tesoros sigue siendo la clave, así que seguid trayéndome todo lo que encontréis, por favor.

¡Lealtad y armas!

Estáis de broma, ¿no? ¿Quién os ha animado a ello?

¡Ya os dije que no tengo tiempo para esto! Entrar aquí y fingir que tenéis cosas para mí no nos lleva a ningún lado. ¡Ni siquiera tenéis algo que se parezca a un Cáliz primigenio, [%username]!

¡Fuera de aquí!