Asfelumbra...

El amor se ha ido, ronda cerca el enemigo. Y os inunda la soledad, pero Aion siempre está.

Este dicho me aporta algo de calma.

Me hirieron. Y, la verdad, no quería volver a enamorarme en mi vida. Me prometí que no volvería a estar con nadie. Pero el amor me atrae con una fuerza casi mágica... ¡Siempre hacia alguien que me hará daño!

Bueno, ¿entonces de quién os habéis enamorado? ¿Siempre va tan mal la cosa?

Sé que solo me ha utilizado. Nunca me quiso. Solo quería mis Quinas.

Le compré todo lo que quiso. Zapatos, joyas... ¡todo! todo lo que se le antojaba. Y no es que quisiera poco. Y cuando ya no me quedaba más dinero, ella tampoco se quedó.

No quisiera cometer el mismo error otra vez, pero... no puedo evitarlo.

¿Y quién es la nueva afortunada? Es lamentable.

Es del distrito de Vanajal y se ocupa de que nadie lo olvide. Total, que cuando menciono su nombre a quien sea de Pandemónium, todos me dicen lo mismo: no se toca.

Todos intentan persuadirme y me recuerdan que me haría daño, que es tan arrogante como si fuera de Elísea.

¿Pero qué puedo hacer? Es lo de siempre. No puedo dejar de pensar en ella. Incluso después de todo lo que ya me ha pasado, sería capaz de darle hasta mi último Quina.

Espero que no os hagan daño otra vez...