¡Soy el cocinero Ratatouille!

Saludos, Daeva.

Ni un solo día sin energía del soberano.

No puedo mirar de brazos cruzados y por eso he puesto mis fuerzas al servicio de los Daevas.

¿Veis el pastel de ahí delante?

Si ponéis las manos sobre él, podéis recibir un regalo.

Aunque no encontréis ninguno aquí, he hecho pasteles y los he repartido por toda Atreia, así que id a buscarlos.

Si encontráis un pastel grande, recibiréis un regalo aún mejor.

(Termináis la conversación).