Id enseguida a la [%dic:STR_DIC_W_SZ_DF4_A3]. Parece ser que hay un problema con la Máquina de éter.

Por qué precisamente allí... Esa máquina es la más importante de todo Gelcmaros.

Como tal vez ya sepáis, el aire de esa región tiene poco éter. Por eso se han colocado máquinas en distintos sitios; transforman la fuerza de la naturaleza en éter para que podamos utilizarlo.

No es mucho, pero suficiente para utilizarlo como en el campo etéreo. La soberana Lumiel inventó la máquina y nos la regaló.

En el Campo de Pruebas de la [%dic:STR_DIC_W_SZ_DF4_A6], bajo la Catarata de Gelcmaros, está el cristal de Lumiel. Su función es clave en la producción del éter.

Angrad, uno de nuestros soldados más fiables, está destinado allí precisamente por eso y nos ha informado de que la Máquina de éter no funciona bien por algún motivo desconocido.

(Seguís escuchando).

No es una exageración afirmar que el fin de la batalla en Gelcmaros depende de la disponibilidad del éter. Si no podemos poner en marcha la Máquina de éter, nos veremos obligados incluso a retirarnos.

He oído que la Máquina de éter del Campo de Pruebas de la Cuenca de Crug ya no funciona. Angrad parece desesperado.

Si esto sigue así, pronto dejaremos de tener éter suficiente.

Por favor, aceptad este trabajo antes de que se convierta en un problema.

Ya he avisado a [%dic:STR_DIC_N_Angrad]. Id a verlo.

(Termináis la conversación).

¡[%username]! El general de brigada dijo que me enviaría a alguien muy capaz. Así que vos sois.

He dejado a Dénsquel al cargo del campo de pruebas y he venido aquí para buscar una solución, pero hasta ahora no he conseguido nada. En las demás zonas, las máquinas funcionan sin ningún problema. No consigo entender por qué falla la de aquí.

No tengo ni el más mínimo indicio, aunque es bastante extraño...

(Baja la voz). Aquí en el campamento se encuentra el anciano reiano [%dic:STR_DIC_N_Aesir], que conoce muy bien el éter y el drana. Le he pedido consejo.

Dice que no sabe nada, pero me parece que oculta algo...

Como a mí no me responde, quería pediros que hablarais vos con él.

(Termináis la conversación).

Gelcmaros es mi hogar desde hace siglos.

Todo lo que pasa aquí se puede averiguar a través de la energía del aire.

Por eso sé el motivo de que hayáis venido a verme.

Sin embargo, no tengo una respuesta para vos.

(Preguntáis si no puede o no quiere responder).

Llevo viviendo aquí tanto tiempo porque no me gusta mezclarme en los asuntos de otros pueblos.

Eso también va por los Elims, que me han pedido ayuda, pero os confiaré algo.

La energía se transformó cuando apareció el Guarda de Taloc en la Cuenca de Crug.

No es ninguna coincidencia que la Máquina de éter haya dejado de funcionar justo ahora. Está claro que algo no encaja en la Cueva de Taloc.

Buscad al [%dic:STR_DIC_N_CaspaGhost_02] y preguntadle todo lo que queráis saber, aunque si no conocéis a los Elims, os será complicado conseguir respuestas.

(Termináis la conversación).

Hay algo que no encaja y la clave está en la Cueva de Taloc.

Me enviaron para encontrar el éter.

Taloc me dijo que debía buscar la Máquina de éter y el campo de pruebas, pero no los encuentro.

En cambio, he dado con vos. Despedís una fuerte energía.

Podéis restaurar el orden. Adentraos en Taloc.

Tomad el Fruto y las Lágrimas de Taloc.

Si coméis el [%dic:STR_DIC_I_L_SHAPE_IDELIM_LGUARDIANCHIEF], podréis usar toda vuestra fuerza.

Utilizad las [%dic:STR_DIC_I_KASPA_GODSKILL_ITEM] solamente cuando os amenace el peligro.

Os llevaré a Taloc cuando estéis preparado[f:"preparada"].

(Os teleportáis a la Cueva de Taloc).

La fuerza de un Daeva no cambia en la Cueva de Taloc.

El poder de un Daeva es tan inmenso que incluso sacude la energía de Taloc.

Muchas gracias, pero debo rechazar vuestra ayuda.

(Termináis la conversación).

No necesito la ayuda de muchas personas.

Si decidís ir a la Cueva de Taloc, venid solo[f:"sola"].

(Termináis la conversación).

He visto vuestra inmensa fuerza.

Ese poder increíble está en vos.

Sois un[f:"una"] Daeva con un poder misterioso. ¿Quién sois?

Todo ha vuelto a su cauce y os lo debemos a vos.

Preguntad a [%dic:STR_DIC_N_Wolfgang] si todo está funcionando de nuevo. Él es quien comprueba las máquinas.

Tengo que volver al lugar al que pertenezco...

Cuando vi que se había vuelto a introducir éter en el cristal de Lumiel, supe que la Máquina de éter volvía a funcionar con normalidad.

¡No sé lo que le pasaba, pero ahora todo va bien!

[%username], he oído que habéis solucionado el problema.

¿Qué ha pasado? ¿La Máquina de éter ha vuelto a funcionar por sí sola? No creo que haya sido tan simple.

En cualquier caso, hay que seguir investigándolo. Pero primero dad parte a [%dic:STR_DIC_N_Barretta], por favor.

(Termináis la conversación).

Me he enterado de que la producción de éter vuelve a funcionar con normalidad.

Los soldados que se ocupan de la Máquina de éter están aliviados de que la corriente de éter se haya normalizado otra vez.

La causa parece haber sido la Cueva de Taloc. ¿Qué ha pasado?

Contadme lo que ha ocurrido en ese lugar.

(Informáis de lo sucedido).

Un fragmento de Aion... Por eso surgió la zona distorsionada en la Cueva de Taloc después de la Gran Catástrofe.

Ahora cobra sentido. El fragmento de Aion que había en Taloc hacía que las criaturas absorbiesen energía etérea, con lo cual contaminaban el éter y, a su vez, provocaban que el Guarda de Taloc viniera hasta aquí.

Por eso la Máquina de éter no funcionaba: la había destruido la energía del Guarda de Taloc.

Pero aún queda una pregunta sin responder: la mayoría de los que comen el Fruto de Taloc no tienen ninguna ventaja especial por ello, incluso algunos sufren desagradables efectos secundarios. En cambio, vos habéis obtenido un poder inmenso.

El Fruto de Taloc no os da fuerza, sino que os permite utilizar la que tenéis. Eso significa que vuestro potencial es enorme.

Rezaré al soberano empiriano. Esas increíbles habilidades deben utilizarse por el bien de Asmodia.

Hablar con [%dic:STR_DIC_N_Barretta]

Visitar a [%dic:STR_DIC_N_Angrad] y pedirle que explique el problema

Pedir consejo a [%dic:STR_DIC_N_Aesir]

Ir a ver al [%dic:STR_DIC_N_CaspaGhost_02]

Maximizar vuestras capacidades con ayuda del [%dic:STR_DIC_I_L_SHAPE_IDELIM_LGUARDIANCHIEF] ([%14]/1)

Limpiar el interior de Taloc con la ayuda de las [%dic:STR_DIC_I_KASPA_GODSKILL_ITEM] ([%17]/20)

Eliminar a [%dic:STR_DIC_M_IDElim_3F_KomadeNM_53_Ae], el origen de las impurezas ([%20]/1)

Hablar con el [%dic:STR_DIC_N_CaspaGhost_01]

Hablar con [%dic:STR_DIC_N_Wolfgang]

Dar parte a [%dic:STR_DIC_N_Barretta]

Orden: la máquina de fabricación de éter que se encuentra en el Campo de Pruebas de la Cuenca de Crug no funciona. Debéis averiguar el motivo y repararla lo antes posible.

La Máquina de éter del Campo de Pruebas de la Cuenca de Crug ya no funcionaba, y no se sabía por qué. El reiano Edas dijo que había cambiado la energía en el aire de Gelcmaros desde que apareció el Guarda de Taloc. Por tanto, os pidió que inspeccionaseis la Cueva de Taloc.

Vuestras fuerzas se desataron gracias al Fruto de Taloc, y por eso disponíais de un poder descomunal dentro de la cueva.

Eliminasteis a Celestio en la Cueva de Taloc, ya que absorbía toda la energía etérea. A continuación se volvió a estabilizar la corriente etérea y la Máquina de éter volvió a funcionar.

Una vez concluida la misión, disteis parte a Valeta. Ella os contó que lo único que hace el fruto es poner de manifiesto el poder de cada uno, y le habían sorprendido vuestras capacidades.

Nueva misión: [%questname] Progreso: [%questname]